Ana J.G., de 63 años, la matriarca del clan de "Los Madriles", permanece investigada junto a su marido y 3 hijos como presunta cómplice o cooperadora necesaria de la detención ilegal y agresión sexual de una joven, hechos por los que su otro hijo Javier G.J. está en prisión desde enero. Ayer, la madre fue juzgada en otra causa por un delito de robo con fuerza. Admitió la culpa y aceptó una condena de 2 años de prisión, en la que se tiene en cuenta la agravante de reincidencia, pues Ana ya había sido condenada en firme por el mismo delito.
Junto a otra mujer de 34 años, Lidia P.A. -que se conformó con una pena de 1 año de prisión, más baja porque carece de antecedentes computables-, queda probado que acudieron a una vivienda de San Cibrao das Viñas, el mediodía del 15 de diciembre de 2016, de cuyo sótano que se encontraba abierto se llevaron dos fregaderos de cocina.
El 22 de diciembre de ese año, entre las 16.20 y las 17 horas de la tarde, se dirigieron a otra vivienda de San Cibrao das Viñas, donde fracturaron la puerta de acceso para apoderarse de cuatro ventas de aluminio que había en el interior, valoradas en más de 4.000 euros. Por último, entraron en una nave del mismo municipio aprovechando que la puerta estaba abierta y se llevaron una caja de recortes de aluminio.
