La llegada de la Alta Velocidad a Galicia será una realidad a finales de 2019. Así lo garantizó ayer el ministro de Fomento, Iñigo de la Serna, al proclamar que "vamos a cumplir los plazos establecidos aunque lleguemos con la lengua fuera". Una alusión directa relacionada con que a finales del presente año todos los tramos pendientes deben estar en fase de ejecución, incluidos los de la integración urbana de Ourense, sobre todo el último, que une Seixalbo con la estación Empalme. La previsión es que el AVE llegue este mismo año en fase de pruebas por el nuevo trazado en el tramo Zamora-Pedralba y a finales del próximo año en el de Pedralba-Ourense. En cuanto a la nueva conexión ferroviaria Lugo-Ourense, el compromiso del Ministerio de Fomento se fija en el horizonte de 2021, con dos variantes: Os Peares y Rubián, con una inversión que supera los 1.600 millones de euros.
De la Serna rubricó dichos compromisos durante la presentación de un sello de Correos dedicado al centenario del Puente Nuevo de Ourense. El ministro reconocía que después de superar las dificultades que surgieron en los tramos pendientes desde Madrid a Ourense, con obras comprometidas que se volvieron a reanudar en todos ellos, a día de hoy se "trabaja a un rendimiento muy alto con el objetivo de cumplir esos plazos", a la vez que se intenta reducir los tiempos entre Galicia y Madrid.
El ministro admitió que hay tramos en los que los trabajos van más lentos, y "algún punto crítico", como sucede con el de Portocamba-Cerdedelo, por la construcción de un viaducto, o el de A Teixeira, donde se realiza "una obra de ingeniería relevante", pero se "trabaja intensamente para cumplir los plazos", mientras que en el resto de los tramos "vamos razonablemente bien".
Es por eso que, según las previsiones que maneja el ministro de Fomento, se espera que en este mismo año puedan estar "por debajo de las cuatro horas" con la meseta, y la vez entre Ourense y Lugo se podrían situar en una hora y media. Y en 2021 se reducirá el tiempo entre Lugo y Madrid, que pasará de las seis horas a las tres horas y cuarto, mientras que con Ourense se reducirá a una hora, una vez concluidas las dos nuevas variantes, la de Os Peares y Rubián.
Integración urbana y estación
En lo que también incidía de la Serna es que "seguimos trabajando en la variante de Ourense en su trama urbana, la conocida como "exterior", cuya construcción "se hará de manera simultánea" a la actual trama ferroviaria, en la que el Ministerio de Fomento tiene previsto invertir más de 100 millones de euros para su acondicionamiento.
Sobre esta cuestión, el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, presente en el acto, aclaró posteriormente que "no queríamos que la variante exterior fuese una excusa para retrasar la llegada del AVE, ni renunciar a ella". De ahí que "asumimos el doble compromiso que anuncio el ministro: actuar en el trazado actual y en la variante nueva", apuntó.
Otra de las cuestiones relacionadas con al Alta Velocidad es la "apuesta por la intermodalidad" en la futura estación en la que "colaboraremos". Y así ya se licitó la obra para el acondicionamiento de las actuales vías, con una inversión de 17 millones, con un plazo de ejecución de un año, además de que se cuenta con el informe favorable del Ministerio de Medio Ambiente, "por lo que nos libera el camino y nos permite seguir trabajando para poder presentar pronto el proyecto" de la estación de Norman Foster.
De la Serna asegura que el acuerdo entre las tres administraciones -Estado, Xunta y Concello-, es total y espera que "en este mes o a comienzos del siguiente podremos aprobar el proyecto del aparcamiento subterráneo de la estación intermodal", lo que para el presiente de la Xunta es una "muy buena noticia", toda vez que la estación intermodal "es una apuesta por la competitividad de la ciudad, por traer a Ourense millones de turistas, que pasarán por ella para entrar en Galicia". Además de suponer "un antes y un después para los barrios de A Ponte y O Vinteún, que han permanecido rotos y alejados, pero que ahora tendrán una conexión".
Por su parte, el alcalde Jesús Vázquez proclamó que "es un gran día para la ciudad" y que "se convierte en el eje de comunicación de la Alta Velocidad".
