Una conductora de 21 años responderá en el juzgado por un delito contra la seguridad vial tras triplicar la tasa máxima permitida de alcohol. Su acompañante, un hombre de 54, fue detenido por agredir presuntamente a un agente de la Policía Local. Los dos vecinos de Bueu (Pontevedra) protagonizaron el incidente a las 2 de la madrugada del jueves al viernes.

Una patrulla de servicio por la zona de la Policía Local dio el alto al vehículo que conducía la mujer, un Renault Clio, tras ver que avanzaba en zigzag por la calle Reza, en el centro de la ciudad de Ourense.

Tras interceptar el automóvil, los municipales se dieron cuenta de que la conductora presentaba síntomas de circular bajo los efectos del alcohol. Cuando la mujer estaba realizando la prueba, el acompañante se bajó del vehículo.

El arrestado opuso resistencia

Según la versión de la Policía Local, el hombre insultó presuntamente a los agentes. Cuando los funcionarios le requirieron que se identificase, llegó a golpear a uno de los municipales. Tuvo que ser reducido y detenido. Opuso una "fuerte resistencia", asegura la policía ourensana en un comunicado.

La conductora dio un resultado en la prueba de alcoholemia que superaba en más de tres veces la tasa máxima permitida, que es de 0,25 miligramos por litro en aire para todos los automovilistas salvo los noveles y profesionales. Según los agentes que intervinieron en este caso, la mujer también se dirigió a ellos con insultos. La Policía Local elaboró un atestado que fue remitido al juzgado de guardia para que la autoridad dirima la responsabilidad de la joven y el hombre.