Los arquitectos analizan el Centro Intergeneracional de la Fundación Amancio Ortega en Ourense, "como referencia en la arquitectura asistencial", dentro del programa "Olladas na rúa" que desarrolla la delegación de Ourense del Colegio de Arquitectos de Galicia, al frente del que se encuentra Alberto de Paula. Los autores del proyecto, Cristina Vilariño y Rafa Pier, explicaron durante la visita realizada al referido edificio que el reto era "mezclar en un mismo edificio dos usos", con una parte dedicada a la atención de niños de 0 a 3 años y en la otra un centro de día, para personas mayores". El resultado fue magnífico, al adoptar soluciones que permiten utilizar las dos zonas por separado, pero con la posibilidad de que los mayores se puedan mezclar con los niños, en un momento determinado, si así lo requiere la programación de actividades a realizar.
"Conseguimos ese objetivo, haciendo una especie de U en el edificio. Tiene dos alas, en las que se ubican la escuela infantil y el centro de día, y en el medio hay un patio con una valla que separa la zona infantil de la de mayores, pero con la posibilidad de que puedan compartirlo niños y mayores. Ocurre lo mismo con el huerto, que tiene separadas la parte de los niños de la de los mayores, pero en un momento determinado se pueden unir, para que realicen cultivos conjuntos", explica Rafa Pier.
Esta pareja de arquitectos -trabajan juntos, pero además están casados- realizaron construcciones como la ganadora del Premio del Colegio de Arquitectos de Galicia, por una vivienda unifamiliar denominada Casa Domitila de Oleiros, han obtenido el tercer premio de la Casa da Cultura de Moaña, una casa unifamiliar en Tomiño y también ha tenido mucha repercusión la reforma que diseñaron para su estudio de arquitectura, ubicado en la rúa Padre Feijóo de A Coruña. Todas estas actuaciones han tenido una gran repercusión en medios especializados en esta materia de numerosos países.
Rafa Pier considera que la arquitectura "está para resolver problemas a través de la belleza". En este sentido añade: "Uno de los materiales con los que trabajamos los arquitectos es la belleza, arte que se muestra en la música, en la escultura, en la pintura, en la literatura, en el cine y en la arquitectura. El ser humano necesita belleza alrededor, como el deporte, que es otra forma de belleza".
El coautor del proyecto del Centro Intergeneracional de la Fundación Amancio Ortega advierte de que "en ocasiones la gente considera que lo bello y lo útil es incompatible. Eso no es verdad. Nosotros no lo vemos así. La arquitectura rural tradicional, popular, es muy bella, porque no tiene recursos para perderse en frivolidades. Entonces soluciona problemas, con la tecnología que había en ese momento, y de la forma más eficiente posible. Así surgen sistemas constructivos como las galerías, que no se realizaron por estética, sino para resolver problemas, y luego se consolidaron como un referente estético", indica Rafa Pier.
Algunos de los arquitectos que participan en las "Olladas na rúa" confiesan abiertamente que en su momento adoptaron algunas decisiones a las que no recurrirían en el momento actual, al comprobar la existencia de otras alternativas que pueden ser más favorables. Pero ese no es el caso del Centro Intergeneracional de Amancio Ortega en Ourense, debido al poco tiempo transcurrido desde el momento de su presentación. Se realizó el acto a principios de este mes y todavía no ha empezado a funcionar. Y pese a que el Colegio de Arquitectos lo ha calificado como "una referencia en la arquitectura asistencial", Rafa Pier indica: "Si es bueno o no lo dirá el tiempo. La presentación se realizó el 12 de marzo y todavía no cuenta con usuarios".
