El gobierno municipal del BNG en Castrelo de Miño, que dirige Xurxo A. Méndez, asegura que continúa trabajando y apostando por el futuro, por vivir en el rural, por el progreso y fomentando los procesos de concentración parcelaria, y critica al PP y PSOE por oponerse.

Desde el BNG destacan que la realizada en Bouzas en 2010, actualmente es "el mayor viñedo de la D.O. Ribeiro, un espejo en el que mirar, y por lo que se va a realizar en Prado de Miño este año, en el que una mayoría de vecinos decidieron dar el paso para avanzar y mejorar, y cortar de raíz el abandono en el que comienzan a estar los viñedos y parcelas, en un terreno de 100 hectáreas de viñedo formado por más de 1.500 parcelas que comienzan a estar abandonadas debido a su minifundio y falta de accesos".

Y aunque la edil socialista en Castrelo, Cataliña González, asegura que su oposición a la parcelaria es como vecina y no como política, el BNG critica que "el PSOE anda buscando firmas por Prado para intentar boicotearla. El PP que tramita y apoya esta concentración desde la Consellería de Medio Rural tiene unos concejales en Castrelo que votan en el pleno en contra de parcelaria de Prado. Curiosamente cuando gobernada el BNG en la Xunta los ediles del PP de Castrelo en 2010 apoyaron la concentración de viñedo de Bouzas. Diez años después los nuevos concejales en vez de avanzar e ir hacia adelante, van hacia atrás". Asegura que no le sorprende que la edil socialista continúe "continúe con sus desvaríos ideológicos y se comporte como la cuarta edil del PP de Castrelo, con posicionamientos ideológicos idénticos al partido de derechas en todos los plenos, y votando siempre a favor de las iniciativas conservadoras y en contra del gobierno de progreso del BNG".

El BNG pide a los vecinos de Prado que estén tranquilos, y los felicita por su "valentía", por apostar por la parcelaria. Dice todo sigue su tramitación correspondiente en la Consellería, que está con los estudios ambientales hasta junio. Y como ya se explicó in situ en las reuniones informativas que hubo, "es un proceso largo, garantista para los propietarios, que irán técnicos de la Xunta, identificando las parcelas y preguntando a cada vecibno".