La situación de incertidumbre que vive la Cámara de Comercio fue determinante para que la junta directiva de la CEO constatase ayer la inexistencia de ocho empresas (cinco titulares y tres suplentes) dispuestas a situarse como representantes de esta entidad en el pleno de la Cámara de Comercio, en el inminente proceso electoral abierto, después de que sus dirigentes presentasen la dimisión en bloque el 28 de noviembre del año pasado.

En el debate generado en el transcurso de la junta directiva quedó constancia del respeto a la Cámara, pero la negativa a formar parte del próximo pleno de la Cámara, fue general, dado que tampoco existen garantías de que puedan aparecer la otra veintena de miembros de la organización cameral, al margen de la CEO, que acepten el reto de asumir la gestión.