En Ourense, una de la ciudades con la tasa de criminalidad más baja de España, la trama más truculenta se gestó en el lugar más insospechado: la comisaría de Policía. Anónimos que acusaron a compañeros de corrupción, robo de armas del búnker, la desarticulación del grupo antidroga, el presunto homicidio de un agente del que dos compañeros son sospechosos. Ocho investigados con uniforme en tres causas distintas. Un mes después de la detención de los policías gemelos por el supuesto crimen, los anónimos y el robo de las pistolas, y a unos días de que llegue un nuevo comisario con 5 años por delante para tratar de pasar página y olvidar el negro pasado, el líder del SUP en Galicia, el ourensano Roberto González, resume el sentir de una plantilla en continuo sobresalto en los últimos tres años.

- Mañana se cumple un mes de la detención de dos compañeros por el presunto homicidio de otro, ¿cómo está la comisaría de ánimo?

- La noticia de la detención de los dos hermanos y su investigación por el homicidio de Celso causó una enorme conmoción. Apelamos a la presunción de inocencia, como hemos hecho siempre, pero si se demuestra que son culpables, todo el peso de la ley debe caer sobre ellos. La situación parece más dramática de puertas fuera que en el seno de la comisaría. Lo acontecido no afecta a los buenos servicios que se prestan a diario a la ciudadanía. La Policía ha sido la primera interesada en llegar hasta el fondo del asunto.

- Son conocidos y apreciados, y hacían vida en comisaría. ¿Se imaginaba la plantilla que pudieran estar implicados en la muerte de Celso?

- No podemos hablar por todos, pero a la gran mayoría de la plantilla le cuesta creer que pudieran estar implicados activamente en la muerte de Celso. Tenemos que ceñirnos al veredicto de la juez, que es quien ha determinado que hay indicios suficientes para relacionarlos. Tenemos que destacar el buen trabajo realizado por la UDEV de la comisaría de Ourense. Su informe se ha basado en una investigación rigurosa, aportando hechos y datos contrastados e informes periciales y científicos, y no en escritos anónimos, ciertas suposiciones e interpretaciones varias.

- Anónimos, robo de armas, fabricación de pruebas, un posible crimen. ¿Dan crédito compañeros de otras comisarías a lo que sucedió aquí? ¿Imaginabais cuando salió a la luz el anónimo a la prensa todo lo que vendría detrás?

- Es difícil de creer que eso pueda pasar en una comisaría, y aún mas difícil en una tan poco problemática como la de Ourense. Por el comportamiento puntual de dos o tres personas no se puede juzgar a todo un colectivo. Hay muy buenos profesionales en la comisaría provincial de Ourense que se dejan la piel para sacar los servicios y las investigaciones adelante, y que están a disposición de cualquier requerimiento las 24 horas los 365 días del año.

Se supo desde el primer momento que el anónimo enviado a los medios de comunicación era falso, que salía de alguien de la casa y tenía como objetivo hacer daño y perjudicar a otros compañeros. Había que investigar quién lo había remitido, que posiblemente era el mismo que había sustraído las armas, y que las acusaciones que se manifestaban no se ajustaban a la realidad. Eso es lo que hizo la UDEV de Ourense. Si la Unidad de Asuntos Internos, y en concreto el inspector jefe del Grupo VI, que fue el responsable de esa investigación, hubiese llegado al fondo del primer anónimo, estas detenciones se hubiesen producido 3 años antes, y posiblemente hoy no tendríamos que lamentar muchas de las cosas que sucedieron a posteriori.

- Cuando se desarticuló al anterior grupo antidrogas en la operación Zamburiña , denunciasteis que la actuación de Asuntos Internos fue desproporcionada. Con las revelaciones de la causa por el homicidio, ¿veis reforzada esa primera impresión?

- A estas alturas de la "película" creo que hasta el propio titular del juzgado que instruye la causa habrá podido comprobar que la actuación de la Unidad de Asuntos Internos fue total y absolutamente desproporcionada, e incluso se podría decir que poco rigurosa. El SUP siempre estuvo al lado de los compañeros proporcionándoles todo el apoyo necesario, y siguiendo la misma línea de defensa desde el primer momento porque conocíamos bien a los policías y sabíamos que eran buenos profesionales e incapaces de llevar a cabo las acciones que se le imputaban. Las actuaciones llevadas a cabo por la titular del Juzgado de Instrucción 3, así como el informe aportado por la UDEV de Ourense a la causa así lo acreditan. Estuvo brillante en la defensa de los afiliados el letrado del SUP, Jorge Álvarez. Se ha hecho mucho daño a mucha gente, un daño irreparable, y esperemos que los culpables paguen por ello.

- ¿Hay motivos de nulidad de la causa de la Zamburiña ? ¿Consideráis que Fiscalía y juez actuaron bien?

- Sí, los hay. Para ir al inicio de las actuaciones hay que remontarse al anónimo remitido a Asuntos Internos a finales de 2014, cuyas aseveraciones, tras la investigación llevada a cabo por UDEV, se demostraron falsas. El principal argumento utilizado por Asuntos Internos para solicitar al juez la autorización de las intervenciones telefónicas fueron unas consultas que el exjefe del grupo de drogas nunca realizó y unos seguimientos basados en meras hipótesis. Se deberían anular las escuchas, y sin ellas no hay caso.

Este puzle tiene demasiadas piezas y todas ellas tendrían que estar unidas. En el escenario actual, nuestro letrado considera que el juzgado que investiga el delito de más pena -el posible homicidio de Celso- es Instrucción 3 y que todas las causas de la comisaría tendrían que ser instruidas por su titular. Entendemos que tras mucho trabajo, juez de Instrucción 1 y fiscal sean reacios a reconocer los errores cometidos en la investigación de Asuntos Internos, pero es de sabios rectificar.

- ¿Ves posible que se restaure la imagen de la Policía en Ourense?

- Se ha conseguido lo más importante: llegar hasta el fondo del asunto. Ahora confiamos en la acción de la justicia y deseamos que se aclare todo lo antes posible. Sabemos que los ciudadanos confían en la Policía Nacional y que las actitudes individuales de dos o tres personas no empañan el buen trabajo diario.

- Juan Carlos Blázquez Hernández es el nuevo comisario de Ourense. ¿Cuáles son sus grandes retos?

- Tiene la misión de desbloquear la construcción del módulo de seguridad en el CHUO. Debe presionar a la superioridad para que incremente la escasa dotación de servicios extraordinarios asignados y de funcionarios en prácticas. La responsabilidad de motivar a todos los agentes y, en especial, a los que prestan servicio a turnos rotatorios, propiciando una modalidad que permita conciliar mejor la vida familiar y laboral. Además debe seguir unos criterios objetivos en las propuestas de condecoración, priorizando los hechos específicos sobre las medallas de trayectoria y actuando con transparencia y objetividad en los movimientos internos de comisaría.

Las referencias que tenemos sobre él son buenas y las sensaciones tras un primer contacto son positivas. Le hemos tendido la mano para colaborar en todas aquellas cuestiones que beneficien al interés general. Le deseamos suerte en esta importante etapa profesional.

- Este año se jubilan 13 agentes y el déficit de plantilla ronda los 60 funcionarios. ¿En qué medida se resiente el servicio al ciudadano?

- La comisaría atraviesa la peor situación en materia de personal de los últimos 15 años. En ese escenario, los servicios solo se pueden sacar adelante con el sacrificio personal y el esfuerzo abnegado de los policías. La ciudadanía no debe preocuparse porque cuando requiere nuestros servicios allí estará una patrulla para ayudar a resolver su problema.

- ¿Qué necesidades en cuanto a medios materiales y formación tiene hoy la Policía Nacional en provincias como Ourense?

- Necesitamos armas de defensa intermedia, tales como defensas extensibles, espráis o táser. Y una formación permanente en cantidad y calidad. Faltan cursos y en alguno de ellos no hay demasiada transparencia por parte de la secretaría general de la comisaría, aunque con la adscripción del nuevo delegado la dinámica está cambiando. Urgen también medidas para paliar los casos de suicidio en el cuerpo.

- Una de vuestras principales reivindicaciones es la equiparación salarial con cuerpos autonómicos.

- Es una reivindicación histórica sindical desde hace casi 30 años y una cuestión de justicia salarial. Contamos con lo más importante, que es el apoyo de la sociedad, porque los ciudadanos entienden que la seguridad es uno de los pilares fundamentales del Estado de Bienestar y no se concibe una policía premium a un precio low cost.