El grupo popular rechazó, con el apoyo de PSOE y OUeC vía abstención o voto en contra, las dos propuestas que presentó Democracia Ourensana en el pleno de ayer. Ambas se habían convertido en la condición para que DO prestase su apoyo a los presupuestos municipales de 2018, una vez que se presente el proyecto. Así, le bastaron sus 10 votos para conseguir que se retirase del orden del día la petición de que se realicen los trámites para proceder a la rebaja del 40% del impuesto sobre vehículos de tracción mecánica. De este modo, también logró sacar adelante la enmienda por la que deja sobre la mesa la otra exigencia de DO: la compra del complejo deportivo Bamio, que se encuentra en proceso concursal, por 700.000 euros.

La postura de los populares llevó al portavoz de DO, Pérez Jácome, a cerrar la puerta a cualquier tipo de negociación en el futuro sobre los presupuestos y advirtió que el PP "se queda con la única opción del PSOE para aprobarlos" o deberá "someterse a una moción de confianza". A su juicio, "dada la cobardía del alcalde, Jesús Vázquez, y su poca cintura para negociar, posiblemente no hará ni una ni otra, así que Ourense seguirá batiendo récords sin tener presupuestos".

Y eso que Jácome apeló a que la bajada del impuesto de vehículos "supone un alivio para el bolsillo de los ciudadanos", sobre todo en un concello que "tiene las mayores cargas impositivas de Galicia por ratio de habitantes". Además, subrayó que con esa medida se "evitará el éxodo" de ciudadanos a concellos limítrofes, ya que, según los datos de que disponen, más de 15.000 viven en Ourense pero están censados en otros concellos.

Seguidamente explicó que lo que se deje de recaudar por ese impuesto se compensará con la aportación del Estado con el supuesto incremento de población, además de "reducir el despilfarro" de gasto público que se produce.

La respuesta del gobierno popular, a través de la edil de Hacienda, Ana Fernández Morenza, fue pedir la retirada de la propuesta, que planteó formalmente, y que fue la que se aprobó por 10 votos, frente a los 8 de DO.

Lo que también puso sobre la mesa Morenza es que el apoyo a la rebaja de ese impuesto se vinculase a la aprobación del Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM), por entender que "sería la forma de financiar esa bajada y de generar ingresos para las arcas municipales".

La postura de los otros dos grupos de la oposición, PSOE y OUeC, fue contaría a esta reducción del impuesto, cargando contra lo que consideran una propuesta "electoralista" y "populista".

Pero el portavoz socialista, Vázquez Barquero, calificó el discurso de Jácome de "neoliberal, que suscribiría, al igual que la iniciativa, el mismísimo Trump". El socialista afirmó que el argumento que esgrime DO es "falaz y sin fundamento", al asegurar que "ningún ciudadano se cambia de concello por el pago de este impuesto".

Por su parte, Martiño Vázquez, de OUeC, alertó sobre las consecuencias que tendría la rebaja del impuesto, sobre todo después de que se aprobase el 10% en el IBI, que llevaría consigo una serie de recortes en otras partidas. Y después de asegurar que "en la vida gobernaremos con el PP", reprochó a DO presentar "cálculos de servilleta" y hacer "política de barra de bar", al no compartir los argumentos que defendía Jácome.