La iniciativa del grupo socialistas para que se adopten las medidas definitivas para dar solución a la demanda histórica de puesta en valor del río Barbaña, con horizonte en 2022, y en colaboración con otras administraciones, contó con el apoyo unánime del resto de grupos.
Pero eso no evitó que por parte del gobierno popular, que defendió las actuaciones que se llevaron a cabo, se recordase que "en más de una década no se hizo nada". Su portavoz señaló directamente a los anteriores gobiernos de PSOE y BNG. Además de anunciar la inversión de 15 millones por parte del Ministerio de Medio Ambiente.
El socialista Javier Rey le reprochó que "habla mucho de planes, pero las realidades son pocas", mientras que Doval, de OUeC, dijo que la responsabilidad es de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil, pero "eso no exime al Concello de su pasividad".