El responsable del Laboratorio del Radón de Galicia y profesor de Medicina Preventiva de la Universidad de Santiago, Juan Miguel Barros Dios, aclara que con las declaraciones que realizó a este diario, en el sentido de que el problema del gas radón de las instalaciones municipales "no está en las manos más adecuadas", "en ningún momento, como director del Laboratorio del Radón de Galicia, reivindiqué la exclusividad de medir radón". Admite que en un mercado libre, "yo no tengo capacidad para tal cosa y nunca lo haría". Sin embargo, reitera que "nos diferenciábamos en las técnicas de medida con nuestros compañeros de la Facultad de Físicas", además de criticar "la aparición de empresas ligadas a la construcción que dicen van a medir radón, como quien utiliza una balanza para pesar patatas". En ese sentido, recuerda que "hasta ayer -como quien dice-, el CSN exigía una calidad de medida a los laboratorios que recomendaba a quienes le pedían información. Durante muchos años tenían una lista de no más de 5 o 6 laboratorios en toda España y uno de ellos el nuestro. Punto. Y se nos exigía una experiencia y habernos sometido a estudios de intercomparación con otros laboratorios. En nuestro caso tenemos 4 al menos de esos estudios con resultados bien favorables".

Barros agrega que intentaba dirigir sus dardos "sobre esos nuevos 'expertos' y sobre las manos no adecuadas, pero no sobre mis compañeros de Físicas que miden, sino de las de algunos responsables, políticos o no, que deciden cosas absurdas y fomentan absurdamente la alarma social entre sus trabajadores".