Dos policías, B.D.L. y R.D.L., han sido detenidos hoy por parte de investigadores de la brigada judicial en relación con la desaparición de pistolas del búnker de la comisaría de Ourense, entre 2014 y 2015, y por la elaboración de anónimos que airearon con falsedades una supuesta trama de corrupción policial y desencadenarían la operación Zamburiña, una causa de Asuntos Internos que estalló en 2015 con la imputación de 4 policías antidroga por supuesto trato de favor a traficantes. La Policía Nacional ha registrado el domicilio de los hermanos en Toén, en el municipio homónimo.

La policía registra la casa de los gemelos

La policía registra la casa de los gemelos

Los agentes investigados por la crisis interna de la Policía Nacional en Ourense han sido arrestados con el visto bueno de la magistrada de Instrucción 3 de Ourense, Eva Armesto. La juez mantenía bajo secreto de actuaciones esta causa desde hace 21 meses, tras la muerte de un policía del área de prensa que apareció en su despacho con 3 de las 6 armas sustraídas. Este agente se autoinculpó del robo del búnker y de los anónimos, pero la juez no se quedó ahí y ha seguido investigando.

Los dos sospechosos, hermanos gemelos, ya no prestaban funciones en Ourense. Uno trabajaba como instructor en la academia de Ávila y el otro se encontraba ya jubilado. Las detenciones, que servirán para arrojar luz sobre una comisaría que ha vivido su peor crisis en sucesivos capítulos desde hace 3 años, se producen después de que otro juez citara a declarar como investigado al secretario general de la comisaría, para interrogarlo precisamente por la desaparición de las armas.