Marcos D. R., de 43 años, está obligado a cumplir 31 días de trabajos en beneficio de la comunidad y a pagar una multa de 540 euros por el desorden público que provocó en el juzgado de Ourense el 12 de agosto de 2016, cuando acudía a declarar por un delito de violencia de género contra su mujer. Ayer se conformó con una condena por las escenas que causó y los delitos de desobediencia, daños y amenazas. El castigo incluye 3 meses de prisión. Se enfrentaba a 18 pero se le aplica una atenuante muy cualificada porque se encontraba bajo el efecto de las drogas.

Su comportamiento fue violento y surrealista: desencajó una puerta del juzgado, se desnudó antes del arco de seguridad, meó hacia los policías, intimidó a su mujer insultando a la juez y su abogada, y causó desperfectos en el coche oficial.

Nada más llegar al edificio, se quedó en calzoncillos y comenzó a gritar a los policías del arco: "Salid a cachearme vosotros, que yo no voy a pasar". Un agente del servicio de seguridad fue al exterior y consiguió convencerlo para que se vistiera. Al introducirse en una de las puertas giratorias del acceso principal del recinto, el encausado comenzó a golpear los cristales y consiguió desencajar una de ellas.

Mientras esperaba su turno para prestar declaración, en la sala contigua al juzgado de guardia, empezó a dirigirse con insultos a los vigilantes de seguridad y a los agentes de comisaría. A pesar de que le llamaron la atención en reiteradas ocasiones, lejos de hacerles caso, continuó chillando y golpeando las puertas de los pasillos. Fue al baño contiguo a a la sala y sacó su pene con la puerta abierta, orinando hacia los agentes en actitud chulesca y desafiante.

A la vista de su actitud y la falta de respeto continuada, alterando además el funcionamiento de las oficinas del juzgado, el individuo fue detenido por orden de la juez, que observó los hechos. En ese momento, mientras le ponían las esposas, tal y como ha quedado probado con la conformidad que prestó ayer en la vista, dijo a los agentes, en tono intimidatorio: "Decidle a la puta de la juez que a mi mujer me la voy a cargar". El individuo también profirió amenazas contra su esposa dirigiéndose a la abogada de ella: "Le dices a la puta que defiendes que la voy a matar".

Una vez fue introducido en el coche oficial para ser trasladado a comisaría, empezó a golpear las puertas con los pies, hasta desencajarlas, doblar el marco y fracturar las ventanillas, causando desperfectos por importe de 585 euros. La Policía llamó al 061 para que calmaran al hombre.

Con la condena que asumió ayer, tiene prohibido acercarse a la mujer en 3 años. No podrá aproximarse a menos de 200 metros de su domicilio o lugar de trabajo, y tampoco comunicarse con ella por ningún medio. El individuo tendrá que indemnizar a la Policía con 585 euros, más intereses, por los desperfectos que ocasionó en el vehículo policial.