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Denuncian la situación de "ilegalidad" de las instalaciones del pazo de Ramirás

Propietarios de la parcela señalan que la actividad se realiza sin licencia de ocupación -El concello hizo un requerimiento para que se paralice la actividad

Zona exterior del Pazo de Ramirás. // Iñaki Osorio

Un grupo de propietarios de la parcela donde se emplaza el Pazo de Ramirás y las instalaciones de lo que fue antiguamente el club tenis, que presentaron una denuncia urbanística por la apertura y funcionamiento sin licencia de las instalaciones deportivas, recreativas y de restaurante, y que aseguran vienen funcionando en la "total ilegalidad", acusan al gobierno municipal de "no hacer nada", y advierten que "incumple su deber legal de manera flagrante.

El concejal de Urbanismo, José Cudeiro, rechaza que exista "pasividad" por parte del concello, y señala que se realizó un requerimiento a la empresa que los gestiona para la paralización de la actividad, además de proceder al correspondiente expediente de disciplina urbanística. Y señala que por parte de la empresa se presentó un proyecto para contar con la correspondiente licencia de obra y actividad.

Una justificación que para los denunciantes no es más que una disculpa, que además están en absoluta disconformidad con esta reapertura de las instalaciones, por el modo en que se ha hecho. Esgrimen que se llevó a cabo sin contar con las preceptivas licencias municipales y autorización de Patrimonio Cultural, sin constituir debidamente una Comunidad y sin adaptar los estatutos de la Urbanización.

Para incidir en que a pesar de que el alcalde esta obligado por Ley a paralizar de inmediato la actividad, y teniendo conocimiento de que el club funciona sin licencia desde hace meses, reprochan que "nada se hizo al respecto de las obras de reforma en el Pazo sin licencia municipal ni autorización de Patrimonio".

Y lo que consideran más grave es que los actuales gestores del Club, que insiste "actúan de forma irregular", anuncian la apertura al uso público de las instalaciones deportivas, cobrando por clases de tenis y padel, además de realizar determinados eventos en la zona del restaurante, y que como recuerdan a día de hoy no cuenta con licencia de ocupación.

Cudeiro discrepa con que se debe proceder al cierre inmediato, alegando que se debe seguir la tramitación correspondiente, tanto de licencia como expedientes de disciplina.

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