La sequía, que ha dejado bajo mínimos pantanos, pozos, pueblos eneros e incluso el curso fluvial del Miño que abastece las casas de la ciudad debido al bajísimo caudal de los embalses, unida a la fuerte oleada de incendios, que están provocando ahora problemas de arrastre de materias de desecho a lo cauces fluviales, han hecho que en algunos hogares de la ciudad, se hayan detectado algunos cambios sobre todo de sabor, en el agua de traída.
Este ha sido uno de los motivos por los que el partido político Adelante, integrado por profesionales y vecinos de todos los sectores profesionales de la sociedad ourensana, ha decidido enviar un escrito por registro municipal del Concello de Ourense, dirigido al alcalde de la ciudad, Jesús Vázquez Abad, para que "sin ánimo de crear alarmas" indican les den todos los datos relacionados con los últimos análisis químicos del agua de l atraída de Ourense, control que es, responsabilidad del ayuntamiento, no de la empresa encargada del mantenimiento del servicio de aguas, Viaqua, indican fuentes del partido y que como tal debiera de tener al día.
Por este motivo en e escrito, presentado por registro el pasado martes 31 de octubre, piden al alcalde de Ourense "que ponga a disposición de nuestros técnicos los últimos análisis de calidad del agua que utilizamos, a la par que pedimos al concejal de Infraestructuras que explique con detalle y para mayor tranquilidad ciudadana, el "Plan de Seguridad de las Aguas del Concello de Ourense".
En el escrito enviado que esperan que sirva también como petición formal para contar con ese plan que estudia y garantiza la seguridad de las aguas de consumo, explican que ese documento "garantiza sistemáticamente la seguridad y aceptabilidad del agua de consumo suministrada por un sistema de abastecimiento".
Aguas de escorrentías
En segundo lugar en su escrito piden "conocer qué tipo de contingencias tienen previstas, en el caso de que con la llegada de las lluvias, por escorrentía no solo del Miño sino de sus afluentes, para paliar la afección por las cenizas".
Según explica en su escrito la preocupación por el estado del agua de consumo en la ciudad se agrava "por los últimos sucesos que no afectan como la sequía duradera, aparición de peces muertos en las aguas de los afluentes principales del Miño que desembocan en Ourense, los pasados incendios o la aparición de "contaminantes emergentes" que en los últimos años se encuentran en los ríos españoles". Este tipo de contaminantes están detectados ya de forma general en los análisis rutinarios que se hacen en otros cursos fluviales que pueden estar abasteciendo a la población.
También muestra este grupo de profesionales que integran la formación Adelante "nuestra preocupación por las últimas declaraciones del Presidente de la Confederación Hidrográfica en la que hace referencia a caudales mínimos" explican al tiempo que subrayan que su intención no es "alarmar sino informar" a la población.
