Unas 4.000 personas se concentraron ante la delegación territorial de la Xunta para protestar contra los incendios forestales. Al grito de "Lumes nunca máis", pidieron un cambio de la política forestal de la Xunta, para que la Administración autonómica dedique más recursos a prevención del fuego durante todo el año, en lugar de concentrarlos en las tareas de extinción en el período estival. Los manifestantes corearon diferentes consignas, como "Galicia non arde, quéimana", y pidieron la dimisión de la conselleira de Medio Rural, Ángeles Vázquez, y del presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo.

Media hora antes, el presidente de la Xunta, acompañado por la titular de Medio Rural, visitó el Centro de Coordinación contra os Incendios Forestais, que se encuentra en las dependencias que tiene la Consellería de Medio Rural en As Lagoas, para analizar la situación y supervisar la evolución de los fuegos.

Los manifestantes agradecieron "la solidaridad recibida" desde todas las partes del mundo. "Hoy estamos gritando 'fuego nunca más' desde Galicia, desde Cataluña, desde Madrid, desde Sevilla, Bruselas y también, como no, desde Lisboa", indicó una de las personas que tomó la palabra, en la concentración convocada por el Comité de Defensa do Monte Galego. Para agregar a continuación: "Estamos tristes y dolidos, muy tristes y dolidos por lo acontecido en estos días, en estos meses, en estos años, en nuestros montes, por la dejadez de los gobernantes, por la ausencia de reacción, por la ocultación manifiesta de la realidad, mediante mentiras y engaños, por parte del Gobierno de la Xunta".

Según uno de los manifiestos leídos por los manifestantes, "esta no es una tristeza de derrota, sino de enfado, de impotencia, junto a la necesidad de encontrar soluciones".

El Comité de Defensa do Monte Gallego advierte de que "las pérdidas económicas, ecológicas y sociales que los fuegos producen en nuestros montes, hacen que nos indignemos". Esta indignación "debe producir una reacción, reacción que una vez más no se ha producido, por parte de los responsables de la política forestal del país".

Los manifestantes lamentan que los lugares afectados por los incendios hayan sido "innumerables". Muchos de ellos, espacios naturales protegidos, parques naturales, reservas de la biosfera, ecosistemas de gran valor económico y forestal. En ese sentido, sostienen que "muchos de los incendios forestales, calcinaron estas zonas de forma descontrolada, por falta de medios, tanto materiales como humanos, y no hemos tenido más pérdidas personales o materiales, gracias a la profesionalidad y a la entrega sin fin de los trabajadores de las brigadas forestales".

Contabilizan cientos y cientos de incendios forestales, miles de hectáreas calcinadas. "Una pérdida económica, ecológica y social que nuestro país no se puede permitir. No puede continuar asumiendo tanta pérdida", sostienen. Pérdida que "profundizan aún más, en la ausencia de alternativas económicas y sociales en el territorio gallego".

El Comité de Defensa do Monte Galego exige, según las palabras de otro de sus portavoces, investigación de las causas de los incendios forestales, aprovechando todos los recursos con los que cuentan las administraciones públicas e instaurando nuevamente las brigadas de investigación de incendios forestales, integradas por agentes forestales, y "desmanteladas por el gobierno".

Reclama además un mapa de medios y recursos, sustitución inmediata de los medios y materiales obsoletos de los servicios forestales de la Xunta de Galicia y equipamientos adecuados para mejorar la eficacia, la protección de los ecosistemas forestales y la protección colectiva de la ciudadanía.

Urge la puesta en marcha, de forma inmediata, del "imprescindible" plan de riesgos laborales, en los servicios forestales de la Xunta de Galicia, el "reconocimiento inmediato" de la categoría de bombero forestal y el incremento de las inversiones en el sector forestal.