La Sala Pardo Bazán del Campus de Ourense se convirtió ayer en otro de los escenarios de la décima edición del Festival Internacional de Teatro. Fue de la mano de la actriz, directora y dramaturga, Avelina Pérez que interpretó su último montaje, "Os cans non comprenden a Kandinsky". Una pieza de teatro contemporáneo que ella misma define como "un grito sucio" y en la que solo la acompaña sobre el escenario Daniel Casquero, pero como espectador.

"Esta pieza es un delirio, y para comprenderlo, el público tiene que conseguir dejarse ir, acompañarme en él", explicaba la autora e intérprete del texto. En "Os cans non comprenden a Kandinsky", Avelina Pérez cuenta la historia de una mujer en busca de olvidar la imagen de un perro abandonado. "La relación con el pintor y el surrealismo se va entendiendo al hilo del espectáculo, que aunque sea de teatro contemporáneo, el público, que no es para nada tonto, puede seguirlo y comprenderlo", defendía esta artista nacida en Santa María de Oia.

Reconoce que su forma de hacer teatro no es precisamente comercial, un tipo de espectáculo que a veces es, además, desconocido: "Apenas me quedan espacios en los que presentar esta obra, es una pena que solo se programe contenido fácil, para no pensar", reivindicaba al tiempo que agradecía la oportunidad que le daba ayer el FITO de mostrar todo su arte.