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Los vecinos del barrio de La Asunción se manifestarán tras 400 días con las obras paradas

Las calles están intransitables al paralizar la obra del entorno de la residencia del campus

Los vecinos del entorno del barrio de La Asunción en As Lagoas tienen preparada una movilización de protesta, cuando se cumplen más de 400 días con las calles levantadas tras la paralización de un proyecto de urbanización de viviendas previsto en el entorno de la residencia universitaria del campus.

A través de la asociación Urba Ourense integrada por profesionales de la arquitectura, técnicos y vecinos de la zona en general, denuncian que "desde el mes de julio en el que el alcalde prometió dar una solución al expediente planteado por la Junta de Compensación, para reanudar las obras de urbanización de la calle Asunción, y vial de acceso a Otero Pedrayo, nada se ha hecho y las obras siguen paradas, no se ve una sola máquina y la maleza prolifera".

En esta polémica a la que se sumó también hace unas semanas el propio párroco de la Asunción, Jorge Estévez denunciando que el mal estado del entorno de la iglesia por el levantamiento de las calles desde hace un año, provocaba caídas en sus feligreses, se suma ahora esta asociación Urba, que denuncia que "de poco vale hacer proyectos y presentaciones, si la calle Asunción y el vial de servicio de Otero Pedrayo, siguen en la deplorable situación que mantienen desde hace un año. Por no hablar de la Rúa Toxal, de la Rúa Torres, de los espacios libres en Maestra Paz Sueiro y otros más".

Unión de los dos campus

Añaden que al hilo del debate que se ha generado en la ciudad, tras el anuncio de que se va a hacer dos glorietas en superficie, para mejorar el tráfico en la avenida de Otero Pedrayo, frente a los colectivos que defienden el antiguo proyecto de soterramiento de la avenida de Otero Pedrayo, para unir los dos campus norte y sur en superficie, sin tráfico rodado, la Asociación Urba afirma que se suma a la defensa del proyecto de soterramiento.

"No se puede desperdiciar una vez más la oportunidad de acometer esta actuación fundamental, dilapidando con un mero lavado de cara, otros treinta o cuarenta años durante los cuales el barrio de As Lagoas, permanecerá seccionado por su mitad" señalan.

Consideran que "estamos todavía a tiempo de no perder recursos importantes en una actuación de baja intensidad, (la de las glorietas en superficie) que no va a resolver el problema del tráfico, ni dar solución al endémico problema de estacionamientos que tenemos en la zona".

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