La Semana Europea de la Movilidad, que se extiende desde el 16 al 22 de este mes, nace con el objetivo de concienciar a la ciudadanía y a los políticos sobre la necesidad de crear una ciudad preparada para todos, no solo para los vehículos, a través de un transporte limpio, inteligente, sostenible y compartido, capaz de respetar a viandantes, ciclistas o personas con algún tipo de discapacidad física y, a su vez, ser respetuosa con el medio ambiente y la salud.
Ciudades como Budapest o Pontevedra han conseguido domesticar el tráfico y convertirse en lugares modelo para otras tantas. Esta última, tras eliminar el aparcamiento regulado y peatonalizar el centro de la ciudad, ha logrado en unos veinte años reducir el tránsito de vehículos en un 70% en el propio centro de la ciudad y un 30% en su conjunto; además, consiguió disminuir en un 70% las emisiones de CO2 y bajar la tasa de atropellos a mínimos.
Ourense, sin embargo, parece estar alejada de ese ideal de urbe que penaliza el uso del coche y favorece el transporte público o los desplazamientos a pie o en bicicleta. En la ciudad, continúa habiendo un sinfín de aceras sin rebajar y los autobuses urbanos no están preparados para el transporte de bicicletas o de personas con discapacidad (siete de ellos todavía no tienen rampa y en muchos de ellos esta no funciona), entre otros muchos detalles que demuestran claramente que Ourense no es una ciudad accesible.
"Ourense suspende en movilidad. La accesibilidad es bastante mala. Cualquier persona con discapacidad funcional o padres y madres con carritos sufren cuando no hay rebajes en las aceras", reconoce Benito Bouzada, portavoz de Stop Accidentes. "No se cumple la normativa de tráfico: hay coches aparcados en pasos de peatones o en paradas de buses y se está permitiendo; quien tiene la posibilidad de hacerla cumplir no lo está haciendo. La gente con dificultades físicas no puede andar por la ciudad como quisiera", sentencia una de las portavoces del colectivo Masa Crítica.
Críticas a la oferta del Concello
Distintos colectivos que forman parte de la Mesa de Movilidad de Ourense como Stop Accidentes o Masa Crítica consideran insuficientes las actividades organizadas por el Concello para esta Semana Europea de la Movilidad.
"Nuestra valoración es que es muy mejorable; colaboramos con el Concello y lo seguiremos haciendo, pero es importante realizar más actividades: concienciar al ciudadano sobre la peatonalización, descongestión del tráfico, etc. Podrían haber organizado un 'Día sin coche', aprovechar para mostrar de mejor forma a la gente el proyecto de "Móvete por Ourense" o fomentar el transporte público, pero no lo hicieron. Un ejemplo de una buena agenda en este caso es Vigo", declara Benito Bouzada, portavoz de Stop Accidentes Ourense.
El colectivo Masa Crítica, por su parte, considera que la oferta debería ser "más ambiciosa", ya que "se cerraron dos calles de la ciudad, pero siguen transitando peatones por la acera y solo es por unas horas al día".
El concelleiro de Infraestructuras, José Araújo, reconoce que la Semana de la Movilidad en la ciudad "está teniendo una aceptación importante y cuenta con la participación de muchos menores que realizan el recorrido en bicicleta por una ruta preparada en San Lázaro, además de tiendas que muestran sus productos para bicicletas y puntos de información que proponen encuestas sobre movilidad".
Benito Bouzada - Portavoz Stop Accidentes
"Ourense suspende en accesibilidad; la movilidad es mala"
José Araújo - Concelleiro infraestructuras
"Las actividades están teniendo buena aceptación"
Colectivo Masa Crítica - Miembro de la mesa de movilidad de Ourense
"La oferta para esta semana debería ser más ambiciosa"
