Carmen Leyte certifica que Josefa Álvarez "tuvo una muerte muy dulce, porque se encontró un poco pachucha en la jornada de ayer, lunes, el único día que no se levantó de la cama, y falleció a la madrugada". Por lo tanto, resalta que "tuvo una vida envidiable, en todos los sentidos". Josefa Álvarez permaneció hasta los 108 años valiéndose por sus propios medios. En la actualidad necesitaba ayuda, para levantarse y desplazarse por el centro. "No tomaba ningún medicamento de tipo crónico -como la tensión o la diabetes-, salvo un Paracetamol, cuando tenía un catarro", explica Carmen Leyte.

En la celebración de su último cumpleaños, el día 16 de febrero de 2017, Josefa Álvarez se preguntaba a sí misma: "¿111?". Y respondía: "Son muchos años", sorprendida de la edad que tenía. Pero mostraba como aval, la perfecta analítica que mantuvo durante toda su vida. En esta ocasión, la considerada "niña bonita" de la residencia, ya no tuvo fuerzas para entonar la Rianxeira. La directora, Vicenta Freire, reconocía que no había sido su mejor día. Sin embargo, la víspera "pasó el día canta que te canta, incluso una canción preciosísima, muy antigua, que antes no la había oído".