El servicio municipal de Banda de Música de Ourense era un clásico del Concello, pero DO denunció hace dos años el "oneroso" gasto que suponía la concesionaria actual que, según sus cálculos, no solo prestaba el servicio de Banda de Música "a dedo", sino que cada concierto suponía una media de 8.000 euros para las arcas municipales.

Eso hizo que el actual gobierno local, que se encontró con el problema a su llegada en 2015, no pudiera hacer la renovación rutinaria de contrato con la Asociación Ricardo Courtier, y se viese obligada a convocar un concurso en dos ocasiones. Las bases fueron estrictas y obligaban incluso a los músicos a demostrar una determinada formación musical y años de experiencia que no todos podían acreditar.

Ahora la nueva concesionaria, si no aparecen otros escollos en el proceso, tendrá que cumplimentar un mínimo de 45 conciertos anuales, amén de cumplir con sus obligaciones en conciertos didácticos y otras compromisos que le pueda plantear el gobierno local.