Ganaderos de los concellos de Viana do Bolo y A Gudiña se concentraron ayer, frente a las oficinas agrarias de la Consellería de Medio Rural, para presentar sendos escritos, en los que solicitan ayudas por las pérdidas que están sufriendo sus explotaciones, derivadas de los efectos de la sequía.

Ambas convocatorias lograron sumar casi un centenar de participantes que han acordado repetir de manera semanal, cada jueves, estas concentraciones a las puertas de las oficinas agrarias. Una medida que han decidido mantener "hasta tener respuesta" por parte de la conselleira titular de este departamento, Ángeles Vázquez. Según el sindicato Unións Agrarias, Vázquez afirmaba el pasado miércoles, que desconocía la existencia de ninguna petición de estos profesionales para reunirse con ella. Sin embargo, la organización defiende que le han enviado ya "hasta cinco escritos" con esta solicitud.

Ante esta situación, UU.AA. califica de "insensible" la actitud que está manifestando el gobierno de la Xunta de Galicia con los ganaderos, dada "la difícil situación económica que está atravesando la provincia de Ourense". Se refieren a las consecuencias que las heladas del pasado abril y la fuerte sequía de los últimos meses han tenido sobre las principales producciones, en especial del Macizo Central, como son la castaña, la ganadería de carne y la apicultura.

En el caso de la ganadería extensiva, desde el sindicato agrario apuntan que el problema reside en la falta de pasto y agua, lo que aseguran que podría está incrementando en más de dos euros por vaca y día los costes de producción. Una situación similar a la que se estaría viviendo en la apicultura,

Unións Agrarias advierte además, de que en el sector de la castaña se han perdido 1,5 millones de kilos, lo que calculan que vienen a ser 1,5 millones de euros. Un problema que también afectaría de forma colateral a las explotaciones ganaderas que tienen en este fruto, un complemento de renta.