Una de las actuaciones que venía siendo objeto de las demandas de vecinos y usuarios, y a la que después de un largo periodo de tiempo se da una respuesta por parte de la Xunta con el proyecto para "mejorar la accesibilidad y la movilidad" en la carretera OU-105, que une la capital con el núcleo de Seixalbo, y que tendrá una inversión de en torno a un millón de euros, es objeto de alegaciones por parte de vecinos y diferentes colectivos. En este caso de la asociación vecinal de Seixalbo y de los colectivos "Amigos da Terra" y el de "Masa crítica ".

Y así, aunque consideran el proyecto de gran interés para la mejora de la calidad de vida de los habitantes de este municipio, así como para la reducción y eliminación del número de atropellos que cada año van en aumento, advierten sobre "carencias" que tiene el mismo, y que a la postre son el objeto de las alegaciones.

Estos colectivos advierten que se está hablando de un avance de la seguridad viaria que ellos no constante de ahí que afirmen que hay "una total ausencia de medidas de seguridad viaria en la misma, que pone en peligro diariamente las vidas de peatones y ciclistas que transitan por esa vía de comunicación.

El avance de la seguridad viaria está directamente relacionada con la pacificación del tráfico y esta implica la recuperación del espacio para un uso público, como señalan. Además de aludir a que pacificar el tráfico es pensar que los peatones y las bicicletas son los elementos a proteger en la ciudad, y no los vehículos, como referencia de cualquier tipo de actuación que se lleve a cabo.

También hacen referencia estos colectivos que reducir la velocidad de las carreteras no sóolo salva vidas, sino que mejora la calidad de vida y "anima a un incremento del uso de la bicicleta para los desplazamientos diarios, reduciendo así la cantidad de vehículos personales que transitan en la ciudad, y en consecuencia, las problemáticas derivadas del tráfico, propiciando una mejoría de la calidad del aire y del clima urbano".

Es por eso que consideran que la OU-105 es una carretera que "secciona en dos el territorio de la zona de Seixalbo", además de "aislarla" por lo tanto a sus habitantes como se de un muro se tratase. Con el agravante de que "impide el desarrollo de la vida normal para muchas vecinos, convirtiendo acciones como ir a la escuela, al supermercado, al bar o a tomar el autobús en un riesgo continuo".

Eso les lleva a destacar en sus alegaciones la necesidad de hacer hincapié en el "carácter vertebrador del territorio que debe tener este proyecto", y en este sentido consideran los pasos elevados como la mejor medida para dar confort, seguridad e integrar la población de Seixalbo a ambos lados de la OU-105

Vegetación

De ahí que insistan en la necesaria protección de la vegetación arbórea de todo el trazado, así como en el aumento de la misma, con el objeto claro de humanizar la carretera, proporcionar sombra a los numerosos viandantes que la recorren diariamente y mejorar la calidad del aire, "al suponer los árboles, grandes sumideros de CO2, principal gas causante del cambio climático".

En lo que se refiere a su estructura técnica, el proyecto contempla la construcción de tres pasos de peatones con iluminación específica y la instalación de semáforos con pulsador. Mejoras en las paradas de autobuses, en el firme de la vía y de las aceras, así como la construcción de una nueva senda ciclista en sentido subida al Polígono Industrial de San Cibrao das Viñas y aparcamientos en toda la carretera Las obras que se van a realizar en "una zona con bastantes incidentes de tráfico", sobre un tramo de kilómetro y medio de longitud.