"Necesitamos medios de respuesta rápida". Fue el lamento del alcalde de Verín al valorar esta mañana la desoladora situación causada por un fuego que ya ha devorado 1.200 hectáreas. Gerardo Seoane cuestionó el despliegue de medios en las primeras horas del incendio: "Yo estaba allí por la tarde y no era tan grave. Se podía haber acotado con más medios, pero no llegaban".
La impotencia se colaba entre las palabras del regidor, que exigió "medios de respuesta rápida" ante estas situaciones. Seoane culpó al operativo contraincendios del avance de las llamas. Señaló que el fuego se podría "haber atajado" de haber medios de "intervención rápida" para controlarlo cuando "era pequeño" inicialmente y evitar así su rápida propagación. "Está claro que la vigilancia no funciona. Es conveniente pensar en algún sistema de intervención inmediata para que el fuego no se propague porque después es incontrolable", reflexionó en una valoración inicial de lo sucedido.
El regidor explicó que desde primera hora de esta mañana los operarios municipales trabajaban en el abastecimiento de los depósitos de agua de la zona afectada.
Por su parte, la conselleira del Medio Rural, Ángeles Vázquez, ha respondido que hubo una "rápida respuesta". En una conferencia de prensa, Vázquez ha señalado que el operativo fue desplegado en solo "ocho minutos" tras el aviso de incendio, detectado ayer hacia las 16:30 horas en una zona de la parroquia de Vilamaior de Val y que se extendió con rapidez por el municipio de Verín, lo que obligó a las autoridades a cortar tramos de autovía y carretera que ya han sido reabiertas al tráfico.
La reacción del operativo no permitió, sin embargo, neutralizar el fuego, que se extendió rápidamente debido en parte a condiciones "de viento y sequía" extremas en la zona, "aparte en lo que se refiere a climatología", ha dicho la representante del Gobierno autonómico.
Según la conselleira, un total de 700 personas han participado entre ayer y hoy en el operativo de extinción del incendio, que actualmente está "estabilizado". En las labores de extinción del incendio forestal de Verín y de seguridad de la zona están implicados agentes y medios de la Xunta, la Diputación de Ourense, los ayuntamientos de la zona y soldados de la Unidad militar de Emergencias.
Vázquez ha indicado la intención de la Xunta de levantar durante la jornada el nivel de alerta dos -de un total de tres-, que fue establecido ayer por la proximidad de las llamas a zonas habitadas. La conselleira ha señalado que fue necesario utilizar incluso el agua de las piscinas municipales en determinados momentos en los que se agotó el suministro del que disponía el operativo. Según la representante de la Xunta, aunque "ya no corren peligro las casas", el operativo seguirá descargando agua sobre la zona como de medida preventiva para evitar una reactivación, y ha precisado que es el único incendio activo en Galicia.
