Después de dos años sin ver pirotecnia en el cielo del barrio de A Ponte para despedir las fiestas grandes, esta madrugada se produjo el momento más esperado por los vecinos y vecinas en el programa de festejos: la sesión de fuegos de artificio, cuya celebración se truncó en la edición anterior debido al riesgo de incendio por elevadas temperaturas en la provincia.

El color sobre el cielo negro del barrio ourensano marcó la última de las cinco noches de fiesta que permitieron honrar como se merece a Santiago Apóstol.

La jornada de actividades de ayer estuvo precedida por la disputa del IV Campeonato de Llave y la procesión en honor a Santiago Apóstol, uno de los eventos principales en la agenda de las fiestas del barrio ourensano. Además, en sesión vespertina, la Fiesta de la Espuma sirvió de alivio a los 30 grados que se registraron en Ourense en el día de ayer. Antes y después de la sesión de fuegos artificiales, la música de orquesta animó el penúltimo día de festejos.

Hoy, está prevista la celebración de la misa en honor a Santa Ana para dar por finalizados los seis días de festejos que llenaron las calles del barrio ourensano de diversión, devoción y tradición.