La construcción de la nueva sede, cuyas obras avanzan a "buen ritmo", es fruto de un convenio de colaboración entre la UVigo y la Xunta firmado en 2014. El edificio, de tres plantas, tiene una superficie de 3.500 metros cuadrados y contará con 16 laboratorios singulares y una nave de hidráulica para la Escuela de Aeronáutica con laboratorios de aerodinámica, propulsión y resistencia de materiales. Los diferentes espacios se dedicarán a investigar áreas como la contaminación de aguas y suelos, tecnología y diagnóstico de medios acuáticos, biotecnología o arqueología. Acogerá también un espacio para el nuevo doctorado Campus del Agua en la segunda planta.