Desde Unións Agrarias denuncian "irregularidades" en los años 2013 y 2014, cuando más de 100 viticultores fueron sancionados por el Consello Regulador D. O. Valdeorras, lo que dicen motivó la salida de la presidencia de José Luis García y José Vicente Solarat, y por las que emprenderán acciones legales, un contencioso administrativo, e instan a la Xunta a que actúe de inmediato. Advierten que seguirán investigando porque "ésto acaba de empezar".
Según el responsable de Agricultura de UUAA, Xosé Ramón González, estas "irregularidades" están confirmadas en la auditoría que contrató el actual presidente, Francisco García. Apunta que hubo un "exagerado" pago de 125.228 euros por una web, cuyo precio no debería superar los 1 0.000 y del que solo aparecen facturas por 90.190, lo que es "una irregularidad grave". Se trataría de "malversación de fondos públicos, de defraudación o apropiación indebida". Destaca pagos no informados al pleno, de 154.781 y 77.546 euros, en 2014 y 2015.
Destaca irregularidades detectadas en las altas de viticultores que la auditoría atribuye a una "dejación de funciones del órgano de control", y en las modificaciones del registro vitícola, "sin visitas de campo" por lo que "quien dice que el viticultor miente y hace un cupo para meter uva foránea". Asegura que todo ésto "justifica que un grupo de grandes bodegas se aferren al Consello", por lo que instó también a intervenir a los sindicatos SLG y Fruga, pues "a nivel gallego no saben nada de esto".
