Se cumplieron las previsiones, y el portavoz del grupo socialista, José Ángel Vázquez Barquero, dejaba claro ayer al gobierno popular que "no cuente con nosotros para la aprobación definitiva del nuevo Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM)". Un documento que está pendiente de la adaptación a la Lei del Solo de Galicia por parte del equipo redactor, y que el edil de Urbanismo, José Cudeiro, espera entregar la próxima semana a los grupos de la oposición.

Además, rechazó el argumento que tanto el alcalde, Jesús Vázquez, como el edil de Urbanismo utilizan habitualmente, en el sentido de que es "el plan que aprobó el anterior gobierno Socialista". Sobre esta cuestión Vázquez Barquero es rotundo: "Ya no es nuestro plan", debido a que "desaparecen las señales de identidad y su contenido".

Una alusión directa al proyecto de integración de la Alta Velocidad en la ciudad y la estación intermodal. Para el portavoz Socialista "hubo un cambiazo", como sucedió con el plan de Urbanismo aprobado en 2003, también por el PP, y que fue anulado por el Tribunal Supremo. Una cuestión sobre la que dice ya advertió al gobierno popular hace 13 meses, "sin que se produjese cambio alguna, sino todo lo contrario".

Fue en aquel momento cuando Vázquez Barquero alertó sobre que "no estamos obligados a prestar nuestro apoyo como pretende el alcalde". Y eso que no se conocía el proyecto de intermodal ni lo usos para la estación de autobuses que se trasladará de ubicación.

Convenio Marco

Pero el punto de inflexión para adoptar la decisión de no prestar su apoyo al nuevo PXOM es la firma, por parte del alcalde, del convenio marco con el Ministerio de fomento, la Xunta y Adif del proyecto de estación intermodal con la que están en total desacuerdo, al apostar por la propuesta de Norman Foster que ganó el concurso en 2011.

Además, de nuevo hizo referencia a que el alcalde asumió compromisos urbanísticos y económicos "sin estar autorizado", toda vez que se trata de "competencias propias del pleno, por el que no pasó", y que sería el que debe aprobar la delegación de esas competencias en el regidor.

Pero lo más grave de todo el proceso que se siguió, y que para los Socialistas es determinante para poder prestar su apoyo al nuevo Plan de urbanismo, es que recientemente "se nos presentan tres proyectos burdamente cosidos entre sí", como son los de la estación de la mano del equipo de Foster, el de la vías por parte de una empresa dependiente del Ministerio de fomento, y el de la Xunta relativo ala estación de autobuses y el aparcamiento subterráneo.

Siguiendo esa línea argumental para apuntalar su rechazo al documento del nuevo PXOM, Barquero también hace referencia a que "estamos ante partidas de inversión infladas", ya que el proyecto que "nos pretenden colocar no es más que un lavado de cara de la actual estación". Así como la "recalificación de terrenos de la actual estación de autobuses -en O Pino- que se trasladará a la futura intermodal, y que en el convenio aparece con "fines lucrativos".

Junto a estas cuestiones, los socialistas también suman lo que acontece con el plan de movilidad que "queda dinamitado" con el proyecto presentad. El motivo que esgrimen es que no se contempla el actual corredor ferroviario que quedaría liberado con la variantes exterior. Así como el plan del transporte metropolitano para la comarca de Ourense, que firmó el alcalde con la Xunta y que, como advierte Barquero, "no pasó por pleno".

Por lo que la el portavoz Socialistas pone de manifiesto que "no vamos a plegarnos ni a claudicar como hizo el alcalde con el PP de Santiago y Madrid", y proclamar que "no vamos a renunciar a la inversión pública más importante en los últimos 30 años. De no haber una "estación intermodal digna no apoyaremos el PXOM", y de esa forma "no traicionaremos a los ourensanos", y mucho menos "seremos cómplices, que es lo que pretende el alcalde". Un decisión firme, rubricada con un: "no vamos a dar un paso atrás".