La Audiencia acogió ayer el juicio contra un hombre y una mujer acusados de receptación y blanqueo de capitales por recibir en sus cuentas bancarias a través de internet dinero de origen desconocido para transferirlo a terceros. Ambos reconocieron ante el tribunal que realizaron las transferencias a sus cuentas, si bien afirmaron que desconocían el "origen ilícito" del dinero. Para ellos, lo que hacían era un trabajo por el que cobraban un sueldo de casi dos mil euros.

M.H.O. afirmó que nunca sospechó que ese dinero fuese ilegal e insistió en que lo único que buscaba era un empleo para mantener a su familia. El trabajo lo encontró en internet, en una página en la que figuraba el logotipo del Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales, de ahí que creyese que era legal. Durante el período investigado, julio de 2012, realizó cuatro envíos de dinero a Kiev.

La acusación modificó la pena que pedía inicialmente para ella de 3 años y solicitó un año y medio, con el pago de una multa de 25.000 euros, y 11.621 euros de responsabilidad civil. La acusación particular se adhirió a esta petición.

El acusado, por su parte, llegó a un acuerdo con las partes por el que se reduce la petición a tres meses de cárcel, multa de 5.000 euros y responsabilidad civil de 9.000, en aplicación de la atenuante de dilaciones indebidas, circunstancia que no se ha tenido en cuenta en el caso de la mujer, por no comparecer la primera vez que fue citada.