Los vecinos de San Miguel de Oia salieron recientemente a la calle para reclamar que la sucursal de Abanca no cierre durante tres días, decisión que ha tomado la entidad para las próximas semanas. Los residentes de la parroquia temen que la clausura parcial termine provocando el cierre total, y aseguran que otros servicios como un cajero automático no son suficientes. La Asociación de Vecinos de San Miguel de Oia denuncia la progresiva pérdida de servicios en la parroquia.