El juez ordenó ayer prisión provisional para el presunto atracador de dos comercios en el barrio de A Ponte ocurridos el pasado sábado. El detenido es un hombre de 41 años, natural de Ourense, con 11 arrestos anteriores, al que ahora se le atribuyen dos robos en los que utilizó un arma de fuego para intimidar a los responsables de los negocios. En el momento del arresto alegó que había tirado la pistola al río Miño, pero sin precisar en qué zona.

Los dos robos se produjeron a última hora de la tarde del sábado. Primero accedió a una clínica de fisioterapia de la calle Ribeira de Canedo donde, según el relato de la víctima, encañonó a la encargada para que le diese el dinero. La entrada del marido frustró el atraco y el hombre huyó. Poco después se denunció otro robo, también a punta de pistola, en un negocio próximo al anterior. El atracador se metió en el mostrador y apuntó a la mujer que se encontraba allí en el estómago para que le abriese la caja. Se llevó 400 euros. La Policía Nacional lo detuvo el martes. Ayer fue puesto a disposición judicial y enviado a prisión.