La tristeza por la pérdida de la joven de 13 años que el miércoles se suicidó en Ourense invadió ayer el IES As Lagoas en el que la menor cursaba sus estudios con un rendimiento brillante. La comunidad educativa se reunió en el patio del centro tras la hora de recreo para guardar un minuto de silencio en homenaje a la chica cuya muerte ha generado inquietud entre el alumnado y los padres. La Consellería de Educación no trasladó su solidaridad a la familia y ratificó ayer que "no consta" en el centro educativo ningún protocolo abierto respecto a esta alumna "ni constancia de que existiese ningún tipo de acoso". En todo caso, la Policía Nacional sigue interrogando a los compañeros para determinar si existían problemas de convivencia y la Fiscalía de Menores está a la espera del atestado para averiguar los porqués de este suicidio que ha conmocionado Ourense.