El alcalde de Ourense, Jesús Vázquez, ha dado el primer paso en firme para el proyecto de pacificación del tráfico rodado en la ciudad, y ha pedido a la Policía Local para que inicie los ensayos previos a la implantación de las velocidades máximas de 30 kilómetros por hora, en determinadas zonas del casco urbano, en especial las sensibles próximas parques infantiles.

De igual modo la Policía Local, en colaboración con la firma adjudicataria de la red semafórica de la ciudad, ha implantado ya de forma experimental la reducción del tiempo de espera para peatones, en algún grupo semafórico que se ha reducido a 30 segundos, para disminuir así la alta incidencia de personas que cruzan de forma inadecuada. Esta situación se produce porque "se cansan de esperar", según los datos recopilados entre los viandantes por Stop Accidentes.

Estas medidas se empiezan a aplicar de forma provisional, coincidiendo además con una semana "negra" en materia de seguridad vial, en la que tres personas, fueron atropelladas en el casco urbano, algunas con heridas de gravedad, en algún caso cuando atravesaban zonas señalizadas.

El primer grupo semafórico en el que se ha implantado ya esa reducción del tiempo de espera para cruzar de los peatones , según señaló ayer el concejal de Tráfico, Carlos Campos, es el que está en el Parque de San Lázaro, próxima a la parada de taxis. Según el concejal, al tratarse de una calle muy estrecha hay poca visibilidad, y los peatones se incorporaron para cruzarla cuando tienen casi encima el vehículo que circula desde Concejo con dirección a calle Bedoya. La implantación de esta reducción de tiempos para que el peatón no se "lance" a cruzar de forma indebida, irá acompañada de un control para ver si se reduce en efecto la siniestralidad.

La otra medida que se quiere poner en marcha es esa reducción a un máximo de 30 kilómetros por hora del tráfico rodado, "que incluso en algún caso puede rebajarse hasta 20 kilómetros por hora", advierte Carlos Campos y que se va a empezar en las calles donde técnicamente sea posible "y en entornos como los parques del de Parque Barbaña, en el área de hormigón y otras que se encuentran sin cierres de protección y en las que los niños pueden salir en cualquier r momento a recoger una pelota a la calle", explica.

Críticas de Amigos da Terra

Algunas de estas medidas forman parte de las propuestas que se barajaron en la Mesa da Mobilidade del Concello, integrada por grupos políticos y asociaciones de todos los signos, que tiene por objetivo pacificar el tráfico en la ciudad y darle prioridad al peatón y a la circulación en bicicleta.

Sin embargo según Víctor Barro, representante de Amigos de Terra en esa Mesa, "no se están cumpliendo algunos de los compromisos que se barajaron en esa mesa, como la colocación urgente de pasos de peatones elevados," dice "medidas que supongan actuaciones reales de pacificación del tráfico y contra los atropellos y al mismo tiempo permitan que en Ourense ser peatón sea algo más seguro", indica.

También ven inadecuado "hacer una campaña para "criminalizar" a peatones y vehículos "cuando Ourense está pensada para el bienestar de los coches y son estos los que atropellan al peatón y no a la inversa", indica.

En este sentido exponen fallos de prevención como el de como los semáforos, que "nunca cambian a verde para los peatones", manifiesta el portavoz de Amigos da Terra en la Mesa, cosa que, según el concejal del área ya están empezando a implantarse, así como ausencia de pasos de peatones en rotondas y puentes y también la existencia de pasos de peatones borrados o desplazados, que obligan a caminar cientos de metros para cruzar la calle", expone Víctor Barro.