El Concello de Punxín celebró ayer su pleno ordinario, en el que en ruegos y preguntas Cambio Inteligente pidió al alcalde, Manuel Vázquez, que defienda, jurídicamente, la institución ante las acusaciones de la Comisión Intermunicipal del Bombeo de Razamonde/San Trocado, que atribuyen a Punxín el pago de más de 18.000 metros cúbicos de agua de otro concello, por valor de unos 4.500 euros.
El pleno municipal aprobó ayer con el voto en contra del PSOE el ceder a la Diputación que saque a concurso el servicio del bombeo en alta de los tres concellos, Cenlle, San Amaro y Punxín, y la cesión al ente provincial del pago a Fenosa del coste energético del bombeo, y después repercuta su cobro a los concello cada tres meses, en un 40, 35 y 25 por ciento respectivamente.
Precisamente, sobre el bombeo del agua, CI instó al alcalde a que defienda al concello, ya que se le está acusando de mal uso de los fondos y caudales públicos, y al PP que gobierna y a CI por consentirlo, con "datos falsos". Quiere que se demuestre "quién dice mentira y quién la verdad". Y es que recuerda Joaquín Moldes que Punxín tiene un único contador y de cada 4 litros de agua se pierden por las tuberías 3. Dice que CI está haciendo gestiones con la Diputación para resolver este problema, porque "somos los únicos que tenemos los datos reales" de lo que se consume, entradas y salidas de depósitos, y demás.
También se aprobó, por unanimidad, un convenio de colaboración entre Punxín y San Amaro para que el transporte interurbano llegue a Punxín y a Laias, compartir ese servicio. CI pidió aquí incluir que se aplique este criterio a la ruta de termalismo, desde las charcas de Cenlle cerca de Laias a una posible zona de termalismo del Bañiño de Punxín. Fue una negociación condicionada con ambos concellos.
En otro orden de cosas, CI se reunió este miércoles con la directora xeral de Ordenación del Territorio, Encarnación Rivas, para hablar de un Plan Urbe para Punxín, que nunca tuvo, ya que el que pidió en 2015 le fue denegado. El proyecto, que asciende a unos 50.000 euros comprende el asfaltado en caliente de las calles del casco urbano que van al centro de salud, a la escuela, la calle Alberto Cortés, y otras. Quedó en que iba a retomar este proyecto y valorarlo con su equipo.
