Un año después de que el gobierno municipal pusiera en marcha el procedimiento administrativo para activar la concesión de varias cafeterías que estaban cerradas en parques de la ciudad, como sucede con el del Barbaña o Miño, así como la instalación hostelera de las Pozas de Maimón, la situación sigue siendo la misma, como así lo denunciaron los grupos de la oposición.

Además, en la Junta de Gobierno Local del pasado jueves, se desestimó la solicitud de fraccionar el pago de la concesión de la explotación de la cafetería del parque Barbaña, con el argumento de que ni en el pliego de condiciones, ni en el propio contrato se prevé esa posibilidad.

Pero lo que llama la atención a los grupos de la oposición es la "falta de control y seguimiento" por parte del concello de la gestión que se realiza de estos locales municipales, relativas a la instalación en el exterior de terrazas y otros elementos que dudan cuente con la correspondiente autorización.

La que sigue cerrada y con riesgo de "deterioro" es la instalación de la Poza de Maimón, en la zona de Reza, en el enclave de la zona de aparcamiento habilitada en su momento por el concello, y muy próxima a las termas de Outariz.

El concurso para su concesión resultó fallido, con lo que en estos momentos se intenta por parte del gobierno municipal buscar una solución. Un argumento que para la oposición "no deja de ser otra excusa más", y aluden a que no es el único caso, al recordar que la plaza de abastos de a Ponte lleva desde enero de 2015 cerrada.