Un acusado de tráfico de drogas aceptó ayer una condena de tres años y medio de prisión y multa de 3.000 euros, y evitó así la celebración del juicio en la Audiencia Provincial. El hombre, J.A.S., que ya se encuentra en prisión, fue detenido por la policía el 19 de mayo de 2016 cuando salía de su vivienda, en la calle Coruña de Ourense, con 337 euros y un huevo Kínder en el que ocultaba seis papelinas con una cantidad total de dos gramos de cocaína. El arresto se produjo dos meses después de que la Audiencia le condenase a tres años de prisión por otro delito de tráfico de drogas.
Según recoge la Fiscalía en su escrito de acusación, el acusado estaba vigilado y existía constancia de que vendía cocaína desde el 26 de abril de ese año, tanto en su propio domicilio como en el bar Coruña próximo a la vivienda, o desde el coche, en las inmediaciones. Al menos en tres fechas diferentes, los agentes de policía que llevaron la investigación pudieron observar como distintas personas contactaban con el acusado, y cómo este les entregaba algo a cambio de dinero. Posteriormente, los agentes interceptaron a los compradores comprobando que la sustancia era presuntamente cocaína.
El día de la detención, la policía vio como una persona accedía a las 20.00 horas al domicilio del acusado, con el previamente había quedado por Whatsaap, para comprar una papelina con 0,389 gramos de cocaína y un valor en el mercado de 40,45.
En el registro domiciliario se le ocupó una báscula de precisión, además de 2.400 euros en metálico, restos de plástico y una bolsa de color verde con 9,6 gramos de cocaína y un valor de 980,433 euros vendida por gramos.
