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Del "rompedle las piernas" al "te vas a cagar", la bronca entre agentes en una pachanga

Un sargento de Verín declara ante el Tribunal Militar que fue bruscamente insultado por un subordinado -Los testigos: "Fue un lance normal del juego"

Agentes de la Guardia Civil en un control. // Roller Agencia

El Tribunal Militar de A Coruña celebró ayer el juicio contra un agente de la Guardia Civil de Verín acusado de insultar a su superior durante un partido de fútbol sala en el que participaron agentes y vecinos de la villa del Támega. En el transcurso de la pachanga, celebrada el 29 de septiembre de 2014, ambos discutieron y si bien el sargento asegura que fue bruscamente insultado por el agente, este replica que fue su superior el que le mandó callar advirtiéndole: "Te vas a cagar".

Así lo declararon ambos en el juicio militar celebrado ayer, un procedimiento que ha suscitado las críticas de la asociación Unión de Guardias Civiles, UniónGC, que considera "inadmisible" que a una disputa en el ámbito privado y de ocio de los agentes se le aplique el código penal militar. Y más aún cuando este agente ya fue sancionado con cinco días sin sueldo por insubordinación. El acusado se enfrenta a una pena de prisión de entre tres meses y un día y un año, con una petición de la Fiscalía de diez meses, por el supuesto delito de insulto a un superior. En caso de condena, la prisión es efectiva, por lo que sea cual sea el tiempo fijado en la sentencia, una vez sea firme, el agente deberá ingresar en la cárcel de Alcalá Meco.

El Juzgado Togado Militar Territorial número 41 acogió ayer el proceso en el que, según recogió Efe, los testigos señalaron que no escucharon nada y achacaron lo ocurrido a un "lance normal del juego". El sargento declaró que el procesado profirió diversos insultos y amenazas contra él. Según su testimonio, primero dijo a los compañeros: "Rompedle las piernas, dadle duro en la cabeza"; y posteriormente llamó a su superior payaso en "tono agresivo y gritando". En el mismo tono, declaró el sargento, le dijo que lo esperaría fuera. Todo esto, apuntó, ocurrió mientras tenían sus caras "a escasos milímetros". El superior expresó su "temor" a una posible agresión y dijo que se quedó "inmóvil" en todo momento "aguantando el chaparrón". Respecto a que el resto de jugadores no oyó nada de eso, indicó que los compañeros "están silenciando los hechos para no perjudicar al guardia".

Concretamente comparecieron tres civiles residentes en Verín que participaron en la pachanga y describieron lo sucedido como "algo verbal, como pasa con cualquier compañero, un lance normal del juego pero nada más, quedó ahí. No recuerdo ningún tema de agresiones o insultos, no lo recuerdo", explicó uno de los presentes, profesor en la localidad.

Los seis agentes de la Guardia Civil que participaron en el partido también negaron la existencia de un enfrentamiento, aunque sí reconocen que hubo una discusión cara a cara entre el demandante y el procesado, pero sin poder precisar las palabras que se dijeron.

Varios testigos de referencia, que conocen los supuestos hechos por terceros, pertenecientes a la Guardia Civil, detallaron que los agentes que estaban presentes en el partido hablaron de insultos y de que al acusado se le había "ido la olla", aunque los supuestos autores de estas expresiones negaron haber hecho comentarios posteriores con otros compañeros.

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