El fiscal pidió ayer una pena de tres años de prisión por un delito continuado de falsedad en documento mercantil para un hombre acusado de intentar saldar una deuda firmando pagarés en los que supuestamente se hacía pasar por el representante de la empresa de sus hijos, en la que no tenía participación.

Como consecuencia de varias operaciones mercantiles, el imputado, J.A.V.L., debía a otra persona una cantidad de 45.000 euros. Sin embargo, carecía de liquidez para abonarla en ese momento por lo que, tal y como defendió ayer la acusación pública en el juicio celebrado en el Penal 1 de Ourense, extendió un pagaré con fecha del 13 de julio de 2012 y vencimiento el 13 de agosto de ese año.

Este sistema, ideado según el fiscal "con ánimo de obtener un ilícito beneficio", continuó con un segundo pagaré "que renovaba el anterior", con fecha del 20 de noviembre y vencimiento en abril del año siguiente. El 24 de abril de 2013 firmó un tercero que vencía en julio.

Los tres pagarés eran de la misma entidad financiera con el importe de los 45.000 euros adeudados. Tal y como explica la acusación en el relato de los hechos que figura en la calificación, el acusado, "con ánimo de alterar el tráfico jurídico y faltando a la realidad", habría estampado su firma en los citados pagarés "haciéndose pasar" por el representante de una empresa cuyo nombre aparece en la antefirma de los mismos.

La entidad denegó el pago

No obstante, el imputado no tiene participación alguna en dicha sociedad, precisa el fiscal, que, además "pertenecía a sus hijos". De tal forma que cuando el último pagaré fue presentado al cobro, en fecha del 6 de agosto de 2013, el pago fue denegado por la entidad bancaria al no coincidir la firma del emisor con el de la persona autorizada.