Ante las quejas del Cine Club y el PP, el edil de Cultura de O Carballiño, Diego Fernández, señala que hay dos lugares adecuados para celebrar actos culturales en la villa, como son la Casa da Cultura y el auditorio municipal, y que determinados eventos y espectáculos musicales, teatrales, monólogos y otros, tanto por necesidad de escenario y escenografía como por afluencia de espectadores, tienen que ser en el auditorio. Lamenta que el Cine Club lo interprete como un acoso.

Explica que algunos de estos eventos se pueden programar casi un año antes pero otros con solo unos meses, porque dependen de diversas circunstancias, como propuestas de las compañías o grupos, calendario de los catálogos de las instituciones, y más. Dice no es racional privar a los carballiñeses de actos culturales de renombre y con gran asistencia de público, por estar ocupado el auditorio con una proyección de cine que, de modo excepcional, tres viernes, se puede proyectar otro día o incluso en la Casa da Cultura, que "está equipada para ello". Aclara que no se trata de marginar una u otra actividad cultural, sino de utilizar de la mejor forma posible las instalaciones culturales que hay.

Señala el edil que "creemos que el Cine Club hace un trabajo cultural extraordinario, y por eso cuenta siempre con nuestra colaboración en todos los sentidos, pero no nos parece razonable tener que rechazar la programación de eventos culturales de calidad y con gran demanda y afluencia masiva, por no querer cambiar tres proyecciones de día o de sala que, en todo caso, causaría un perjuicio menor que renunciar a actos culturales que suponen un esfuerzo financiero importante y que consideramos realzan la calidad de la programación cultural de O Carballiño".

Apunta que no se trata de desvalorizar a nadie, ni si en algunas sesiones de Cine Club hay 20 o 40 personas, y si en otros espectáculos del auditorio hay 300 o 400, "la cultura debe medirse por otros parámetros, y no debiera crearse ningún conflicto por tener que cambiar tres sesiones". Añade que la Casa da Cultura tiene capacidad para 100 personas, que en 2016 se cambió la pantalla y que está perfectamente equipada para proyectar cine, y si hay que mejorar algún equipo, también se hace.

Lamenta que el Cine Club "interprete como un acoso estas propuestas que les planteamos para racionalizar el uso del auditorio sin que hubiese que suprimir ninguna sesión de Cinemas de Galicia", y añade que "estamos abiertos al dialogo" para arreglar este asunto.