Los grupos de la oposición en bloque (Democracia Ourensana, Partido Socialista y Ourense en Común) rechazan que se pueda dar un uso diferente a la plaza de abastos de A Ponte, que permanece cerrada desde hace algo más de dos años, una vez concluyó la rehabilitación del edificio, obra en la que el Ministerio de Fomento invirtió 2 millones de euros.
Una posibilidad que había anunciado el alcalde, Jesús Vázquez, durante la jornada de puertas abiertas que se llevó a cabo, y que tenía como objetivo mostrar las instalaciones del inmueble a los representantes de diferentes colectivos sociales y vecinales, así como empresariales. Se pretendía que se aportasen alternativas para la gestión, después de dos concursos fallidos, ya que quedaron desiertos al no presentarse ningún tipo de propuesta.
En este sentido, Jesús Vázquez justificó la consulta verbal a Fomento de modificar el uso para "sacar partido a la rehabilitación que se hizo del inmueble", y evitar que permanezca cerrada. Reconoce el regidor que el coste de mantenimiento de los ocho puestos, más un espacio para cafetería y degustación "es costoso", de ahí la necesidad de buscar una alternativa.
Mantener el uso
Pero lo que tienen claro los grupos de la oposición es que se tiene que mantener el uso. Y así lo proclama el portavoz socialista, Vázquez Barquero, en el sentido de que "eso es la plaza de abastos de A Ponte y ese es el uso, no otro". Para cerrar la puerta a cualquier cambio de uso que se pueda plantear por parte del gobierno municipal.
En este sentido, Barquero advierte que el alcalde desde el primer momento "jugó con un criterio predeterminado", y alude a las declaraciones que realizó a comienzos del mandato sobre "una pinacoteca y otras actividades", con lo que "quedaban claras sus intenciones. Además de cuestionar la gestión que realizó hasta estos momentos el gobierno popular, que considera "no fue acertada para desbloquear" la situación de cierre.
Por otra parte, está la propuesta que realizó Democracia Ourensana y que será objeto de debate en un pleno extraordinario que se fijó para el miércoles, 29 de marzo. Y que llevaría consigo que la junta de gobierno autorice al portavoz de DO a realizar la tramitación necesaria para abrir la plaza, con los ocho puestos y la cafetería en funcionamiento, en el plazo de cuatro meses.
En la comisión de pleno que se celebró ayer, la postura del grupo popular adelantó que la rechazará, mientras que PSOE y OUeC optaron por la abstención, que como indicó Barquero es "una reserva de voto" ya que la decisión final la darán a conocer en la propia sesión, una vez la analicen en la reunión de grupo.
La postura de los populares fue criticada por el portavoz de DO, por entender que con su rechazo demuestra que "son los que en verdad bloquean la ciudad", y que son los que realmente "están por el no es no", y que "no quieren soluciones para unas instalaciones que llevan más de dos años cerradas". Y advierte Jácome que en este asunto la "ineptitud" del gobierno popular quedó demostrada.
