El alcalde de Sandiás, Felipe Traveso, convoca a todos los productores de patata de A Limia, almacenistas y regidores, para que participen en una reunión que se celebrará el viernes, a las siete de la tarde, en la Casa da Cultura de la referida localidad. El objetivo del encuentro es "consensuar las medidas que deben adoptarse" para evitar que la plaga de la polilla guatemalteca (Tecia solanivora) entre en A Limia. Felipe Traveso destaca que en esta comarca ourensana se producen 130 millones de kilos de patatas, en 3.500 hectáreas, por lo que "la gente está muy preocupada".
El alcalde de Sandiás ha tomado la decisión de realizar esta convocatoria, porque la Administración gallega "está muy tranquila". En ese sentido, señala: "Se limita a actuar en la zona infectada, pero no se están adoptando medidas para que no se infecten las demás". Felipe Traveso considera que a este problema, "hay que darle la respuesta que se merece", porque "la economía de A Limia se basa más que nada en la producción de patatas".
La polilla guatemalteca entra en la patata y la devora, por lo que "no sirve para comercializar". La polilla pone sus huevos en las patatas de color verdoso, que pueden verse en las fincas parcialmente fuera de la tierra, donde nacen los gusanos que las comen y luego se convierten en polillas: mariposas. Tiene dificultades para reproducirse en zonas de clima frío, pero con la elevación de las temperaturas que se está registrando durante los inviernos, ya ha empezado a colonizar zonas de la costa lucense y del norte de A Coruña.
La comarca de A Limia cuenta con almacenes acondicionados, con temperaturas que oscilan entre 9 y 10 grados, para el suministro de fábricas de patatas fritas. El alcalde de Sandiás avisa de que "a esa temperatura, sí se puede reproducir la polilla guatemalteca". Por lo tanto, "entendemos que hay que tomar medidas, para evitar que la plaga de la polilla guatemalteca entre en A Limia".
Felipe Traveso señala que "tenemos muchas medidas sobre la mesa", para impedir que entre la plaga en la comarca de A Limia, pero de momento no vamos a comentarlas, porque queremos consensuarlas con los demás". De todas formas, adelanta: "Solo hay una forma de combatir, que es inmovilizar la patata que está infectada y destruirla".
La entrada de la plaga de la polilla guatemalteca en A Limia "supondría enormes pérdidas", que arrastrarían a la ruina a muchas familias, porque la Administración ha tomado la decisión de que no se realicen siembras durante cuatro años en las zonas afectadas.
