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Una apertura poco rentable para cumplir un compromiso

La ocupación de la residencia universitaria, que dispone de 201 plazas, está al 13% y su puesta en funcionamiento con el curso ya iniciado no es rentable para la concesionaria, tal y como explicó la consejera delegada de Resa, Mónica Garay, pero su reapertura era un compromiso adquirido con los estudiantes. "El curso estaba empezado y era muy complicado llenar; nuestra decisión, aunque no iba a ser rentable, era demostrar a la comunidad universitaria que estamos con ellos", indicó la representante de la empresa. Destacó la experiencia en el alojamiento de estudiantes adquirida por esta compañía, que en la actualidad tiene 33 centros en toda España con 8.500 plazas.

Garay señaló que desde la empresa concesionaria "hicieron todo lo necesario para poder prestar un servicio público muy valioso para la sociedad". En este sentido, Jesús Vázquez indicó que la residencia universitaria "genera empleo y fomenta el crecimiento de la ciudad y del propio campus". Concretamente ocho puestos de trabajo directos e indirectos creados.

La residencia As Burgas tiene capacidad para 201 plazas en habitaciones individuales con cocina o habitaciones completas con baño independiente, pero con cocina compartida por cada dos residentes. La instalación también cuenta con un gimnasio, dos salas de estar, una sala común y varias salas de estudio y de trabajo.

Actualmente la ocupación es de 26 residentes, ya que la apertura se produjo con el curso académico empezado, y todos son estudiantes del campus, siete de ellos extranjeros que se han incorporado al segundo cuatrimestre a través de programas Erasmus, o personal docente e investigador del mismo. Algunos de los residentes estaban en pisos de alquiler y los dejaron para incorporarse a la residencia. Todos los inquilinos disfrutan de un descuento especial del 40% durante este curso, siendo el precio mensual de 196,8 euros.

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