Un total de 402 conductores han sido sancionados por el "multamóvil" en las calles de Ourense desde octubre del pasado año, fecha de su puesta en marcha y hasta el día de ayer. El AVI (Automóvil de Vigilancia Intensiva), ha ratificado, según el balance aportado por la Policía Local, que las negligencias más habituales de los conductores ourensanos son los estacionamientos en zonas de carga y descarga, paradas de bus o la colocación de sus vehículos en aceras y áreas para peatones.
A los tres meses justos de su puesta en marcha, que se produjo el 18 de octubre pasado, el AVI, o lo que es lo mismo los policías locales que desde su interior sancionan a través de un ordenador y una cámara GPS, ha multado a los propietarios de 160 vehículos por estacionarlos en zonas de carga y descarga fuera de la franja horaria permitida.
La segunda negligencia más habitual y causa de 65 sanciones por parte del "multamóvil" fueron los estacionamientos en paradas de autobús urbano. Esta es considerada una de las más graves por los agentes locales y por tanto no se da un tiempo de espera para que el propietario retire el vehículo, como ocurre con las otras infracciones, y se multa de inmediato, según explica el concejal de Seguridad Ciudadana, Carlos Campos.
La tercera causa más habitual de sanción fueron los vehículos que obstaculizan la circulación. El Automóvil de Vigilancia Intensiva multó a 50 particulares por este motivo. Otras 46 sanciones se impusieron a propietarios de coches estacionados sobre la acera y zonas destinadas a peatones, y 45 por aparcar en doble fila, algo muy común también el tráfico rodado diario de la ciudad.
El "multamóvil" realizó su primera salida oficial hace tres meses por las calles de la ciudad de Ourense, en horario de tarde y sin previo aviso de rutas o itinerarios y con un fin claro: detectar los coches que infringen la Ley de Seguridad Vial un 18 de octubre de 2016. En los primeros días su objetivo era simplemente disuasorio.
"Hay personas que piensan, equivocadamente, que el multamóvil sigue funcionando pero sin imponer multas o que estas no se tramitan, pero este listado demuestra que está funcionando a pleno rendimiento y las multas se han tramitado en su totalidad", explica el concejal Carlos Campos.
La diferencia con una multa convencional que impone un policía de calle "es que no hay notificación en el vehículo sancionado, y la multa llega a casa un mes después de haber sido impuesta".
A diferencia de una patrulla de Policía Local convencional, el "multamóvil" avala de forma irrefutable la sanción, pues una cámara fotografía y ubica por GPS el lugar, día y hora exactos en los que estaba el vehículo mal aparcado.
A través de un ordenador de a bordo, controlado por uno de los dos policías que van en su interior, se registra la multa y se tramita desde el coche a la base central de la Policía Local.
"En los dos primeros meses se realizaron más de 300 sanciones y en el último mes se ha bajado el número de multas porque se ha decidido suavizar la presión con motivo de las fechas navideñas", explica el concejal, "pero la labor del 'multamóvil' se ha demostrado efectiva y seguiremos con él".
DO lo ve efectivo
Desde DO señalaban ayer que "el sistema ha demostrado en ciudades como Vigo que es válido, pues al saber que hay un "multamóvil" en la calle el conductor trata de corregir las infracciones", considera el edil Manuel Álvarez. Opina que su efecto es "más disuasorio que sancionador, y eso es bueno". En todo caso coincide con el edil de Seguridad en que "una mayor presencia de agentes en la calle podrían mejorar la situación", aunque indica que "si siguen esperando para aumentar la plantilla policial, dada la progresiva pérdida de población, igual el número de policías acaba siendo suficiente".
