La Confederación Xeral do Traballo alerta que las empresas públicas ferroviarias Renfe-Viajeros S.A. y ADIF están planificando el cierre del servicio de venta de billetes y atención al viajero de siete estaciones en Galicia, siendo en la provincia de Ourense las de O Carballiño, O Barco, A Rúa y Ribadavia, dentro del proceso de trasvase del canal de venta de billetes de ADIF a Renfe.

El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) está negociando con Renfe cómo trasvasar la venta de billetes en las estaciones de todo el estado español, que ahora hace personal de ADIF para que a partir de 2017 estos trabajos sean gestionados y hechos por Renfe-Viajeros S.A.

Tiene previsto pasarle el personal comercial de las estaciones gallegas de Ferrol, Coruña-San Cristobal, Santiago, Ourense, Monforte, Lugo, Vilagarcía, Pontevedra, Vigo-Guixar y Vigo-Urzaiz, en total 82 trabajadores en Galicia y 836 en todo el Estado, en la primera estimación dada a conocer a la representación sindical.

Dice la CXT que en esta primera estimación ni Renfe ni ADIF incluyen la venta de billetes/atención a los viajeros en estaciones donde este trabajo es realizado por personal de Circulación, no de comercial, ya que en alguna de ellas se compatibilízan los trabajos de venda de billetes y atención con los de gestión de las circulaciones ferroviarias, como son las estaciones de Guillarei, Redondela, O Carballiño, Sarria, O Barco, A Rúa y Ribadavia donde los trabajadores adscritos a esta estación hacen labores de gestión del trafico ferroviario y venta de billetes de larga y media distancia, facturando importantes cantidades de dinero al mes, ya que se atiende a los ciudadanos de comarcas como del Baixo Miño (Tui, Tomiño, Salceda, Gondomar, Ponteareas e incluso ciudadanos de Portugal), Valdeorras, Carballiño y ciudades tan importantes desde el punto de vista turístico, como Sarria, que recibe a muchos peregrinos que comienzan aquí el Camiño de Santiago.

Por ello, el Sector Ferroviario de CGT-Galiza denuncia las intenciónes de Renfe y ADIF de cerrar la venta de billetes e información en estas estaciones a partir de 2017, dejando a importantes núcleos de población sin el servicio presencial, además de suponer el cierre de las estaciones que quedarían en algunos casos sin personal.

Destaca que los trabajadores de estas estaciones atienden una importante cantidad de viajeros y recaudan cantidades considerables de dinero. Así, por ejemplo, en la Estación de O Carballiño el número de billetes vendidos al año fue de 19.367, la media de recaudación por ventas es de 12.625 euros, y el numero de viajeros de origen y destino de 35.252, en la de A Rúa-Petín 10.229 billetes, por 12.933 euros, a 22.504 viajeros, en O Barco Valdeorras fueron 14.200 billetes, por 15.614 euros, a 37.823 usuarios, y en Ribadavia fueron 1.052 billetes, por 350 euros, a 8.003 viajeros.

Ante esta situación, el sindicato inicia desde ayer una campaña de defensa de los puestos de trabajo, contra los recortes en estos servicios ferroviarios.