Carlos Doval, propietario de restaurante A Palleira, perdió hace pocos meses a un amigo, también hostelero como él y propietario de un restaurante distante apenas 20 metros del suyo, que falleció en el establecimiento víctima de un infarto,

"La ambulancia tardó en llegar y no se pudo salvar la vida de esa persona. Esto me hizo reflexionar mucho, porque quizás si hubiese un desfibrilador al alcance se podría salvar la vida de mi amigo", explica el propietario de A Palleira. Por eso su local se convertirá hoy en el primer restaurante de Ourense que dispondrá de un desfibrilador.

A las las doce del mediodía de hoy en este establecimiento del número 96 de avenida de Buenos Aires tendrá lugar un acto donde estarán presentes el presidente de Fundación Gallega del Corazón, el responsable de la Unidad de Arritmias de la provincia de Ourense, la concejala de Educación y Cultura, el gerente de Equipamientos Sanitarios Castro y el propio Carlos Doval.

Se convertirá en el primer restaurante-cafetería de Ourense en incorporar un desfibrilador y tener todo el personal formado en su uso y en resucitación cardiopulmonar ante cualquier eventualidad de los clientes.

Recuerda que fallecen 100 personas al día de paro cardíaco en España y más de 21.000 personas de infarto agudo de miocardio al año. "Eso me preocupa al ver en prensa y en televisión que hay muchas personas que fallecen por estas causas y en la mayoría, si hubiese un desfibrilador al alcance, se podría salvar una vida", explica el hostelero.

De ahí el apoyo humano del Concello de Ourense y la Fundación Gallega del Corazón, ya que ven el asunto con una involucración humana muy importante, "pues seremos los primeros y ojalá pueda animar a muchos más restaurantes a incorporar desfibriladores en sus establecimientos", afirma el propietario.