Una de las cuestiones que quedó clara en el encuentro, más allá de que "no va a haber cambios y se va hacer", es que para la construcción de la variante exterior "se necesita tiempo", debido a que se trata de un proceso "complejo" y con dificultades en el trazado. Ese fue el mensaje del ministro al alcalde, pero sin concretar plazo alguno.

Otras de las cuestiones que no se abordaron en el encuentro fueron las relacionadas con las soluciones provisionales, mientras se construye la variante exterior, para que el AVE llegue a Galicia y entre por la ciudad, y de esa forma cumplir el compromiso adquirido por de la Serna de "agilizar" el proceso y que pueda estar en 2018.

Para Vázquez se trata de cuestiones técnicas que serán objeto de estudio por parte de los técnicos del Ministerio de Fomento, por lo que dice no saber cuál será la decisión que se adopte.

Sobre esta cuestión, las dos soluciones técnicas que estarían sobre la mesa pasan por un intercambiador en Taboadela, como se hizo en Zamora, y también el de Pedralba, en un tramo de 100 kilómetros, que se espera pueda entrar en funcionamiento durante el próximo año.

La otra es un tercer carril en el actual trazado ferroviario, previa electrificación del recorrido, que llevaría consigo su adecuación, aunque será una actuación que no tendría un alto coste económico, en relación con otras actuaciones de nueva construcción.

La que tiene más posibilidades, según los antecedentes que existe en Galicia, es la de un intercambiador en Taboadela para su adaptación al nuevo recorrido hasta su llegada a la estación Empalme, en A Ponte.