Hoy era el día de la matanza y, tras 6 meses de ceba, cada cerdo pesaba más de 200 kilos. Los dos que una familia de Faramontaos de Viña, en el concello ourensano de Cea, había engordado para hacer despensa este año murieron calcinados en un incendio registrado a la 1 de la madrugada del jueves al viernes. Un posible cortocircuito originó el fuego en la cuadra donde estaban los animales. La paja y la leña almacenadas sirvieron de combustible. El alpendre quedó destruido. Las llamas no afectaron al resto de la propiedad, donde la familia no reside. Un vecino vio llamas y llamó al 112. Los vecinos actuaron con mangueras antes de que llegara Protección Civil de O Carballiño. El perro que estaba en la propiedad no se vio afectado. Los bomberos evitaron que el fuego se propagara a las casas cercanas.