La nueva Ordenanza Municipal de veladores y terrazas en suelo público sigue a la espera de un acuerdo entre los grupos políticos. Las diferencias que existen mantienen el bloqueo de la nueva normativa, ya que la que está vigente cuenta con casi veinte años, puesto que fue aprobada en 1997. Y eso que todos los grupos coinciden en la necesidad de dar respuesta al "descontrol" que existe al respecto en varias zonas de la ciudad.
Así, el grupo socialista presentó una enmienda a la totalidad del borrador de ordenanza presentado por el gobierno popular, y que se convertía en un alegato en defensa del proyecto que había presentado cuando gobernaban y que no contó con el apoyo necesario para salir adelante.
En la enmienda presentada defienden la necesidad de llevar a cabo una nueva normativa para "dar respuesta a la realidad actual", para de esa forma "acabar con el descontrol existente". El objetivo en el que hacen especial hincapié los socialistas es "la convivencia entre la utilización de los espacios públicos por parte de comerciantes y hosteleros con el uso y disfrute por parte de la ciudadanía".
El PSOE insiste en que se trata de una propuesta de normativa "abierta y no especialmente restrictiva", aunque consideran importante aumentar el control de colocación de terrazas en parques y plazas de la ciudad, para dar respuesta a la problemática de más de 450 locales que cuentan con licencia de veladores, en total algo más de 1.000 terrazas.
De ahí que los socialistas entiendan que se deben fijar una serie de líneas fundamentales para evitar el "abuso" y el "descontrol" actual, y que señalan que viene siendo "amparado hasta ahora por las lagunas legales existentes en la actual normativa".
Sanciones
También incide en su propuesta en "la delimitación" en la colocación de veladores en la vía pública, y siendo partidarios de un aumento de las cuantías económicas fijadas en los procedimientos sancionadores, ya que en muchos casos les resulta a los infractores pagar la multa y seguir "ilegalmente" en lo que se refiere a la colocación de valadores, muchos más de los autorizado.
Otra de las cuestiones que plantea el PSOE es el "mayor número de alternativas" para la ubicación de terrazas, sobre todo en una son "especialmente sensible como es el casco histórico". Y que se tenga en cuenta la relación de calles consideradas como "zonas saturadas de ruidos" en la ciudad, junto con la modernización del control de terrazas a través de la colocación de un dispositivo en los locales al objeto de conocer de forma inmediata si el establecimiento cuenta con licencia y cumple con los requisitos establecidos.
Pero más allá de las cuestiones técnicas, los socialistas también entienden como una cuestión relevante dotar a la Concejalía de Comercio de los medios personales y tecnológicos necesarios para una vez se apruebe la ordenanza se pueda llevar a cabo y se haga cumplir.
Desde el gobierno que ostenta el PP se evita entrar en polémicas, debido a que "lo más importante es contar con una nueva y necesaria ordenanza", asegura la nueva responsable del área de Comercio, Belén Iglesias, que no obstante coincide plenamente con los socialistas en la necesidad de dotar de más personal y medios, para poder dar respuesta a las necesidades.
Lo que concreta Iglesias es que el proyecto presentado es similar al que dejaron los socialistas, y los únicos cambios fueron los que aportaron desde el propio sector de hotelería, así como colectivos vecinales y sociales, además de los grupos políticos. Es por eso que una vez entregado el borrador, espera que se pueda llegar a un acuerdo y el proyecto se lleve al pleno de enero de 2017 para su aprobación inicial.
