En colaboración con la Udyco Central de la Policía Nacional, la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) de la comisaría de Ourense hizo vigilancias continuas durante más de una semana a Nibia Aurora Cano Carrillo, la colombiana de 49 años acusada de pertenecer a una facción del grupo terrorista colombiano Ejército de Liberación Nacional (ELN), y presuntamente implicada en tres atentados, entre 2002 y 2003, que acabaron con la vida de 5 policías y 3 civiles, entre ellos un niño.

Dar con la mujer, que llevaba 10 años afincada en Ourense, 13 en España, no resultó difícil. Pasaba desapercibida en el trato con sus vecinos, que la definen como una persona "tranquila" y de trato afable. Pero en las redes sociales hacía gala de su vida -desde un partido entre España y Colombia en el Bernabéu, a posados en su caso- y su nombre aparecía en el listado telefónico. Los agentes descubrieron que trabajaba en el club de alterne Tosca, de la calle Ervedelo, y que residía de alquiler en el número 4 de la calle Francisco de Moure.

Las autoridades españolas no tenían sospecha alguna ni tampoco les consta que en la década que ha pasado en Ourense, la mujer mantuviera la actividad por la que la reclama su país de origen. No constaba ninguna conducta anormal para la seguridad ciudadana. Cuando la policía colombiana reunió las pruebas contra Nibia Aurora, emitió una orden de búsqueda internacional. La considera la encargada de reclutar y radicalizar a jóvenes mientras su hermano, también detenido, ejercía de coordinador logístico se encargaba de obtener el material de guerra.

La Udyco Central constató que la mujer residía en Ourense y pidió la colaboración de la UDEV de la comisaría provincial. "No se llevó a cabo una investigación sobre ella, sino que nos limitamos a encontrarla para dar cumplimiento a la orden de detención", dicen fuentes policiales. En ese sentido, estas mismas fuentes indican que el piso del barrio de O Couto no llegó a ser registrado, pese a que otras voces manifestaban ayer que la Policía sí habría requisado documentación sensible para su análisis.

En Pereiro hasta la extradición

Tras su detención, la tarde del lunes, en el bar de su mismo edificio, la mujer fue puesta el martes a disposición del juzgado de guardia, desde donde declaró por videoconferencia ante la Audiencia Nacional. El juez Ismael Moreno decretó su ingreso en prisión, a la espera de que la extraditen. El plazo de repatriación puede durar días o semanas, según fuentes policiales. Nibia Aurora permanece recluida en la cárcel ourensana de Pereiro de Aguiar.

La familia de la colombiana rechaza vínculo alguno de la sospechosa con el terrorismo. "Ella venía cada año a estar con nosotros, así que no entiendo cómo la acusan de prófuga de la justicia si ella siempre salió legalmente del país" , dice su sobrina Nathalia, según El Español.