José Nogueira ha recibido un aluvión de llamadas de apoyo. La noticia de la agresión sufrida el lunes en plena calle del Paseo, la más céntrica de Ourense, tras pedir a un vehículo que le dejara espacio para salir del garaje, se ha traducido en múltiples llamadas, mensajes de wasap y ánimos a través del Facebook, Muchos del ámbito institucional y del PP, del que es conocido militante. Nogueira, "Pepiño", como lo llaman los suyos, se recupera en casa de una paliza que lo llevó al hospital. "Si no es por la gente que estaba en la calle, me matan", dice. Necesita reposo para que baje la inflamación en la nariz, puesto que sufrió una rotura y tendrá que ser intervenido. "Estuve hasta la 1 de la mañana en urgencias. Me hicieron varias pruebas,, incluido un TAC, porque recibí muchos golpes y patadas".

Nogueira tiene recuerdos vagos del momento justo anterior a ser trasladado en ambulancia. Pero el origen y transcurso de los hechos lo relata con detalle. "Yo salía de mi garaje y ellos estaban en el sentido contrario, parados con el coche en medio de la calle. Por la ventanilla les pedí que arrimaran hacia la derecha para poder pasar. Salió alguien de atrás, me tiró un tenedor y ya no hubo conversación de por medio. Cogí el teléfono para llamar a la policía, asustado, pero me sacaron del coche, me quitaron el móvil y las gafas y empezaron a puñetazos y patadas. No hubo intercambio de palabras". Podría reconocer al chófer, que según él no llegó a bajarse del automóvil.

Una testigo fotografió la matrícula del vehículo, que se dio a la fuga. Los presuntos agresores son de etnia gitana. La Policía Nacional lleva el caso. Nogueira aún no ha declarado y no ha decidido si presentará denuncia. "Soy una persona muy tranquila, jamás he tenido follones ni me conocían. Creo que fue al azar, me coincidió a mí pero le pudo pasar a cualquiera".