-¿Reconoce el acuerdo?

-Tengo mis dudas porque el escrito tiene que ser unánime. Creo que el procedimiento no está bien hecho. Pero no voy a ser un problema por eso.

-¿Qué piensa de los cinco diputados firmantes?

-Que tenían que haber sido valientes y subir a decírmelo a la cara. Cuando presentaron el escrito yo estaba en la oficina del grupo. Lo que Baltar no logró a través de su maquinaria, lo consigue, a saber cómo, con algunos miembros del partido. Lo que ha pasado aquí es que algunos traspasaron todos los límites y alguno se equivocó de enemigo.

-¿Qué motivos alegan?

-Falta de confianza del secretario general (Raúl Fernández) hacia el portavoz. Pero ¿por qué no reunió a la ejecutiva? Llevamos tiempo que dos señores, mejor dicho, un señor y una señora (en alusión a la secretaria de Organización, María Quintas), tienen secuestrado el partido. Esto no se le consultó a la dirección provincial, que es un órgano colegiado. Es verdad que algunos miembros pueden tener discrepancias conmigo en cuestiones ideológicas pero no con el trabajo que hago en la Diputación.

-¿Debería pedir explicaciones la militancia por este acuerdo ?

-Aquí no se consultó a la ejecutiva. Cuando se me nombra portavoz, hay una propuesta que se consulta, están los militantes y se elige. Pero esto lo han hecho sin consultar a las juntas de zona ni a los concejales que los designaron diputados. Tendrán que explicar ahora por qué hicieron lo que hicieron. Yo estoy recibiendo llamadas de alcaldes que me dicen que eso no lo permiten y que eso no es así. Ya veremos qué dicen los compañeros.

-¿Intentará invalidar la decisión?

-Yo no me voy a aferrar a la portavocía, aunque crea que no tienen razón. Pero voy a seguir estando como diputado y a seguir haciendo oposición a Baltar. No voy a ser un problema para el partido, porque yo quiero al PSOE. Voy a escuchar a mis compañeros en todas las zonas, a ver qué dicen. A lo mejor ellos piden responsabilidades y no comparten esa decisión. Yo tendré que estar de lado de la gente.

-¿Por qué ocurre esto justo ahora? ¿A qué atribuye la pérdida de confianza?

-Siempre ha habido tensiones, distensiones... pero nunca hubo un problema insalvable. Esto está urdido desde otras cosas.

-¿A qué cosas se refiere?

-Hay una parte pequeña de la dirección provincial que defendió que habría que darle el gobierno al PP en Madrid, entre ellos Fran (el nuevo portavoz) y yo mantuve el no.

-¿Se trata de un castigo?

-No solo eso. Subyace que habrá gente a la que no le interesa tener una oposición tan fuerte a Baltar como la que yo hago. A lo mejor quieren llegar a entenderse entre ellos, pero para eso conmigo que no cuenten, eso lo tengo claro. No tengo que ser portavoz para seguir haciendo iniciativas.